Carlos Mazón se ha despertado este domingo para asistir a la Media Maratón de Valencia. Pero no para dar el disparo de salida como máximo dirigente autonómico, sino para correrla. El presidente 'runner' de la Comunitat Valenciana ya había disputado la prueba, pero esta vez ha sido "especial" por ser la primera desde que ostenta el cargo.
Por ello lleva desde la pasada noche retransmitiendo en sus redes sociales los prolegómenos. "Esto es más importante de lo que parece, al menos en mi caso", subrayó sobre la vaselina. También reveló su secreto para ganar energía instantes antes de la carrera: "No desayuno mucho, pero le doy dos mordidas a un plátano".
Ya esta mañana, abrigado con un cortavientos para protegerse del frío con el que ha amanecido la ciudad, se dirigía de nuevo a sus seguidores desde el asfalto, con los nervios propios de un corredor antes de cruzar la salida. Reveló entonces cuál es su amuleto. "Mis calcetines de la suerte, los de la Senyera", explicó mostrando la prenda con la bandera valenciana.
Cabe añadir que, además del amuleto, Mazón acudía a la prueba bien entrenado. Como siempre destaca, es uno de los muchos runners que corren habitualmente por el viejo cauce del río Turia, un largo jardín ideal para la práctica del deporte.
Mazón se atrevió incluso con una retransmisión en directo mientras corría. "Quedan solo dos kilómetros, así que podemos decir casi casi que lo hemos conseguido. La organización, brutal. Y la ciudad, volcada con los corredores. Otra vez más lo hemos conseguido. Enhorabuena, Valencia", expresó.
El presidente autonómico disputó la prueba junto a dos de sus estrechos colaboradores. Los secretarios autonómicos de Presidencia Cayetano García y José Manuel Cuenca.
Récords de España
Las bajas temperaturas propiciaron grandes marcas en la prueba. Los atletas Carlos Mayo y Laura Luengo batieron el récord de España de la distancia las 32º edición de la Media Maratón de Valencia, en una carrera que contó con 22.000 participantes.
El atleta aragonés ya había anunciado públicamente su intención de batir el histórico récord español que desde el 1 de abril de 2001 estaba en posesión de Fabián Roncero (59:52) y para ello contó con las novedosas zapatillas Adidas Adizero Pro Evo 1, de apenas 138 gramos de peso, con las que la etíope Tigist Assefa entraba en la historia del maratón tras pulverizar el récord del mundo en el Maratón de Berlín hace apenas un mes.
Por su parte, Luengo, pese a anunciar que no se encontraba todo lo bien que deseaba para afrontar la carrera, fue creciendo en su ritmo y en los últimos kilómetros se exhibió en su lucha contra el crono y lograr un nuevo récord nacional con un tiempo de 1:09:41, rebajando en diez segundos la plusmarca que desde 2018 tenía Trihas Hebre.