Una imagen de archivo del expresidente del Consell, Ximo Puig, y la exvicepresidenta, Aitana Mas

Una imagen de archivo del expresidente del Consell, Ximo Puig, y la exvicepresidenta, Aitana Mas Efe

Economía

El Gobierno de Puig acabó 2022 con 1.516 millones de facturas en los cajones, un 58% más que en 2021

La Sindicatura de Comptes confirma el desequilibrio financiero de la Comunitat Valenciana, agravado por la infrafinanciación.

22 diciembre, 2023 18:11
Valencia

La Generalitat Valenciana cerró el ejercicio 2022, el último del Gobierno del PSPV, Compromís y Podemos, con 1.516,2 millones de euros de facturas en los cajones.

Según el Informe de fiscalización de la Cuenta de la Administración de la Sindicatura de Cuentas valenciana correspondiente a 2022, el pasivo de la cuenta 413, conocida como facturas en los cajones puesto que corresponde a gastos no recogidos en el presupuesto, tiene un saldo de más de 1.516 millones. Supone un crecimiento del 58% respecto al año anterior.

En general, el organismo fiscalizador ha señalado que las cuentas del Gobierno valenciano de Ximo Puig de ese año cumplieron los principios contables y la normativa aplicable, aunque ha matizado que existen "excepciones y deficiencias".

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Del documento presentado este viernes en las Cortes Valencianas por el Síndic de Comptes, Vicent Cucarella, se desprende que la Generalitat cerró 2022 con un resultado presupuestario negativo de 3.382 millones de euros. Se trata de un 57,1% más al de 2021 y el peor de los últimos seis ejercicios.

El fondo de maniobra, que refleja la capacidad de la administración de afrontar gastos a corto plazo, fue negativo por valor de 12.811 millones de euros, mientras que el remanente de tesorería (liquidez al cierre del ejercicio), fue igualmente negativo por importe de 4.998,6 millones de euros.

Ambos indicadores empeoraron respecto a 2021, lo que evidencia las dificultades financieras y tensiones de liquidez para atender los vencimientos de deuda a corto plazo, según explicaron este viernes desde la Conselleria de Hacienda que dirige Ruth Merino.

Grave desequilibrio

Según la entidad fiscalizadora, el resultado de su auditoría muestra una "grave y creciente desequilibrio económico-financiero, patrimonial y presupuestario de la Administración de la Generalitat a 31 de diciembre de 2022, con una alta dependencia de los ingresos del endeudamiento".

El resultado económico-patrimonial se vio condicionado por el aumento de los gastos en un 3,2%. Además, en 2022 se invirtió la tendencia creciente de los ingresos, que, por primera vez desde 2017, bajaron un 7,4%. La razón, según el informe, fue la disminución de las transferencias extraordinarias para paliar los efectos de la pandemia.

En este sentido, la Sindicatura de Comptes afea que se incluyan estimaciones de ingresos "no ajustadas a la realidad". "El déficit de los derechos reconocidos respecto a las previsiones definitivas en las transferencias corrientes del Estado del sistema de financiación ha sido de 1.758,9 millones de euros. Esta inadecuada presupuestación aumenta el déficit presupuestario y el recurso al endeudamiento, en tanto que los ingresos no se obtienen y los gastos que se financian sí que se realizan", afirma el informe.

El síndic de Comptes entrega el informe a los diputados de las Cortes Valencianas

El síndic de Comptes entrega el informe a los diputados de las Cortes Valencianas José Cuéllar/Corts Valencianes

Al respecto, desde el Departamento de Hacienda hicieron hincapié en que el déficit de la Generalitat en el último año del Gobierno de Ximo Puig fue el más elevado de sus dos legislaturas en el Consell y se disparó hasta 3.860 millones de euros.

Por otra parte, el balance de la Generalitat Valenciana a cierre de 2022 muestra un patrimonio neto negativo por valor de 46.815,5 millones como consecuencia de la acumulación de resultados negativos por la insuficiencia de recursos de la Comunitat Valenciana, que tienen que cubrirse por medio del recurso al endeudamiento.

Además, la Sindicatura de Comptes dedica un apartado específico al sistema de financiación autonómica. Al respecto, destaca que los ingresos "cada vez resultan más insuficientes para cubrir las obligaciones".

Desde el PP, el portavoz parlamentario, Miguel Barrachina, afirmó que este informe "confirma que la administración valenciana en el periodo del Consell de Puig fue un auténtico caos". 

El síndic socialista, José Muñoz, por su parte, consideró que se "avalan" las cuentas públicas valencianas y que "las conclusiones a las que se llegan reflejan también las consecuencias de la pandemia cuando vivimos una situación extraordinaria".