La asociación Hablamos Español ha denunciado este lunes la situación de un alumno de nueve años en un municipio de la provincia de Valencia, al que, según denuncian, le han suspendido con un 9 un examen de Conocimiento del Medio por haberlo respondido en castellano.
La denuncia aporta fotografías de la prueba, en la que puede apreciarse, corregido en valenciano, "en castellà, insuficient", junto al 9 que suman los puntos obtenidos por el examinado. En el conjunto del documento se aprecia que el niño obtiene la puntuación de 1/1 en todas las preguntas menos en una.
La madre del alumno, en declaraciones a ABC, argumentó que la Constitución Española ampara que se respondan los exámenes en castellano. Pero la Conselleria de Educación, en su respuesta a la madre, argumentó que la decisión de la profesora que suspendió al alumno se ajusta a la normativa valenciana.
"El proyecto lingüístico del centro se aplica en los términos autorizados", le replicaron a la progenitora en un escrito emitido el pasado mes de octubre. "La actuación del centro con respecto a su hijo y el tratamiento de las lenguas es el adecuado respecto a la normativa vigente y a las exigencias de la profesión docente", agregaron.
El menor, desde entonces, ha optado por responder a los exámenes en ambos idiomas, tanto en castellano como en valenciano.
La reforma educativa del nuevo gobierno de Carlos Mazón introduce precisamente la libertad de elección de la lengua para realizar cualquier examen, pero solo a partir de la educación secundaria, según lamenta Hablamos Español, entidad que se ha mostrado muy crítica con la reforma de PP y Vox al considerarla insuficiente.
'Trobades'
Este mismo lunes Hablamos Español emitió un comunicado en el que criticó que "centros de la Comunidad Valenciana, tanto de Primaria como de Secundaria y Bachillerato, están llevando a los alumnos a participar en las actividades llamadas Trobades, organizadas por la entidad nacionalista e hispanófoba Escola Valenciana".
"Se trata de festivales de música en los que los alumnos participan y cantan temas claramente dirigidos a que aquellos que son hispanohablantes sustituyan el español por el valenciano, trasmitiéndoles que deben no solo hablar, sino también pensar en esta lengua. Asimismo, en las letras de las canciones se asocia el valenciano a la construcción del concepto de pueblo, de manera excluyente respecto al español. Pura ingeniería social", denunciaron.
Durante los días previos a la participación en el festival, "se realizan en los centros de enseñanza actividades preparatorias del mismo y se envían tareas a casa, todo ello para reforzar el mensaje que se quiere inocular en el alumnado", según considera Hablamos Español.
La entidad pide a la Generalitat "que cese este tipo de adoctrinamiento en nacionalismo lingüístico en horario escolar y que estas entidades nacionalistas-catalanistas-hispanófobas dejen de recibir fondos públicos de los impuestos de los contribuyentes de la Comunidad Valenciana".
"Respeten la lengua familiar de los alumnos y no alimenten a estos ingenieros sociales que, valiéndose de la música, de grupos y cantantes conocidos y de la diversión, pretenden moldear a nuestros niños y jóvenes a su antojo", demandaron.