"Antes de que un niño se quede sin profesor, se contratará a un profesor sin requisito lingüístico". Así se ha pronunciado el conseller de Educación del Gobierno valenciano, José Antonio Rovira, quien ha avanzado que el Consell contratará a docentes aunque no tengan la acreditación de valenciano con el objetivo de cubrir las plazas vacantes y las bajas de manera más eficaz.
En una interpelación parlamentaria del diputado de Compromís Gerard Fullana, este miércoles el responsable de Educación del Consell de Carlos Mazón ha explicado que entre sus objetivos está incrementar la contratación de profesores, mejorar el programa informático para las adjudicaciones y replantear las exigencias que regulan las bolsas de trabajo.
De hecho, la Conselleria de Educación anunció el pasado martes la creación de una mesa técnica junto a los sindicatos para abordar las soluciones que sean necesarias para cubrir plazas de difícil cobertura de Secundaria y FP.
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En el encuentro abordaron las dificultades para encontrar docentes en determinados puestos como es el caso de Informática o Servicios a la comunidad.
Así, desde el Departamento que dirige Rovira apuestan por flexibilizar los requisitos de acceso o poner en marcha una serie de incentivos para que los alumnos puedan recibir las clases con normalidad.
Durante su intervención en las Cortes valencianas, Rovira ha negado que haya 3.000 profesores sin cobrar y ha acusado a Compromís de "mentir constantemente". "Hay 111 funcionarios interinos que no han cobrado en septiembre cuando el año pasado eran 571", ha asegurado.
En esta línea, ha hecho hincapié en que el número de personal docente para el curso actual ha crecido en 2.625 profesores.
Sobre las adjudicaciones, el conseller ha subrayado que se han conseguido sacar adelante "con sangre, sudor y lágrimas", pese a que "había un plan preestablecido" por parte del anterior Gobierno "para que todo saliera mal".