Cambio político en el Ayuntamiento de Valencia. El PP recupera la ciudad que gobernó durante 24 años Rita Barberá. María José Catalá, la candidata que ha concurrido a las elecciones embarazada de más de 8 meses, se convertirá en la nueva alcaldesa tras la victoria obtenida este 28 de mayo, que pone fin a ocho años de gobierno de coalición liderado por Joan Ribó (Compromís).
El PP alcanzó un total de 13 concejales, que junto a los 4 de Vox sumaron los 17 necesarios para arrebatar a la izquierda el consistorio. La victoria fue por la mínima. La izquierda se quedó a uno. Compromís obtuvo solo 9 y el PSPV-PSOE, 7. El resultado deja fuera del pleno municipal tanto a Podemos (Unides Podem-EUPV) como a Ciudadanos.
En la sede del PPCV en la calle Embajador Vich de Valencia fue in crescendo el optimismo. El resultado era ajustado, pero se mantenía, y tanto PP como Vox estaban más cerca ganar otro concejal que de perder alguno a favor de la izquierda. La comparecencia de Ribó para reconocer la derrota corroboró el vuelco, que se tornó en éxtasis con la llegada de Catalá.
Su rostro era de alivio y cansancio. Abrazó y besó a todo aquel a quien se encontró. Su equipo padecía por la enorme multitud que la rodeaba, habida cuenta de su avanzado embarazo. María José Ferrer, su previsible vicealcaldesa, sucumbía cada pocos minutos a un breve llanto de alegría. Juan Carlos Caballero, su número dos, no podía contener la euforia.
El todavía alcalde de Valencia, Joan Ribó, atribuyó el cambio a "una gran ola de color azul" en toda la autonomía. La misma, en efecto, lo arrasó todo este domingo en los grandes ayuntamientos valencianos. El PP, con el apoyo de Vox, recuperará también las ciudades de Castellón y Elche, y mantendrá con holgura la Alcaldía de Alicante.
El bloque del centro-derecha suma un edil más que en 2015 y 2019, cuando perdió las elecciones municipales de Valencia por solo un representante. Hace cuatro años Compromís logró 10; y el PSPV-PSOE, 7. El PP cosechó 8; Ciudadanos, 6; y Vox, 2.
La de Ribó es la caída de uno de los llamados 'alcaldes del cambio' que accedieron al poder municipal en 2015. Su gestión ha sido controvertida, por una acelerada aplicación de su programa electoral, sobre todo en materia de movilidad, muy contestada por sus rivales.
En 2019, con un PP en horas bajas que tenía a nueve de sus diez concejales imputados, ya le costó revalidar el poder. Concurría a los comicios por tercera vez con 75 años. Pero su etapa ha concluido en 2023.
Toma el testigo María José Catalá, que se convierte en alcaldesa de Valencia a los 41 años tras haberlo sido de Torrent, la mayor ciudad del área metropolitana de Valencia. La dirigente fue también consellera de Educación de la Generalitat Valenciana.
La futura mandataria compareció pletórica, y prometió un gobierno transversal. "El PP ha recuperado la alcaldía para todos los valencianos", dijo. "La ciudad siempre estará por encima de toda ideología", insistió.
Su objetivo, según expuso, es lograr "una Valencia más líder, de sentido común, de prosperidad, de empleo". Llegó incluso a afirmar que trabajará por una urbe "que aspira a ser la segunda ciudad de España". "Me voy a dejar la piel por esta Valencia que sueña. Todos van a sentirse muy orgullosos del nuevo Gobierno municipal", auguró.
Catalá, a diferencia de Carlos Mazón, el ganador de las elecciones autonómicas, cuenta con la ventaja de que en los ayuntamientos, a falta de acuerdo, gobierna la lista más votada, de modo que no necesita el respaldo de Vox para lograr la vara de mando.
Castellón y Elche
El cambio político acaba con la alcaldía en Castellón de la socialista Amparo Marco, que será relevada por la popular Begoña Carrasco. La derecha ganó las elecciones con margen. El PP se impuso con 11 ediles, que con los 4 de Vox ascienden a 15. El PSPV-PSOE se quedó en 9, y Compromís apenas logró 3.
En Elche el Partido Popular recupera la alcaldía de la mano de Pablo Ruz, que reemplazará al socialista Carlos González Serna pese a que su partido fue el más votado. El PSPV-PSOE logró 12 concejales, pero Compromís se quedó en solo 1. El centro-derecha suma uno más entre los 11 del PP y los 3 de Vox.
Por lo que respecta a Alicante, el PP venció y amplió sus apoyos. El primer edil Luis Barcala rozó la mayoría absoluta con 14 representantes. Junto a los 4 de Vox, se situaron en 18, 7 por encima de la izquierda. PSPV-PSOE logró 8; Compromís, 2; y Unides Podem-EUPV, 1. Este último es el único obtenido por los morados en las cuatro mayores ciudades de la Comunidad Valenciana.