Después de más de 30 años de trabajo, nadie ha logrado destronar a Nieves Álvarez como uno de los referentes de la moda española. La madrileña, que comenzó su trayectoria en pleno bum de las supermodelos, en la década de los 90; considera que la visibilidad que obtuvo entonces, sumada a la constancia en el trabajo, le ha permitido seguir avanzando en su carrera. Ha presentado en El Corte Inglés de Vigo su primer proyecto en solitario como empresaria: Una línea de productos de cuidado facial que lleva por nombre "NIEVES".

Pregunta: Después impulsar una marca de moda infantil, ahora se lanza con su propia línea de cosméticos.

Respuesta: Sí, he diseñado colecciones cápsula para una firma llamada Villalobos bajo el nombre "N+V". Estuve diez años y, ocho de ellos, vendiendo en El Corte Inglés. La pandemia se llevó aquel proyecto y ahora este sí que es el primero en solitario como empresaria.

P.: Se llama Nieves.

R.: Se llama así porque es 100% Nieves. Un amigo mío italiano, que es SEO en una gran compañía, me dijo: ‘Nieves, no busques nombres’. Me preguntó: ‘Tu nombre, ¿qué es?’, y yo le respondí ‘Agua’. Volvió a preguntarme que qué necesitaba la piel y la respuesta fue ‘hidratación’. Además, el activo principal lo integran las células madre de la flor de las nieves.

P.: ¿A partir de qué edad es recomendable establecer una rutina facial?

R.: Yo estoy acostumbrada a cuidarme desde los 18 años. Tuve acné, me recetaron el Roacután y estoy muy acostumbrada, desde jovencita, a cuidarme. Yo ahora siempre tengo el asesoramiento de un dermatólogo, sobre todo, para hacer frente a las manchas, que es un tema que nos preocupa mucho a las mujeres.

P.: Su línea de productos faciales, ¿para qué edad está diseñada?

R.: La he pensado para mujeres a partir de los 35 años, es decir, pieles maduras. Yo en Madrid cuando tengo algún evento me suele tratar Felicidad Carrera, y siempre me ha dicho que a partir de los 35 hay que cuidarse más para luego tener buenos resultados. Mis productos son muy buenos, pero si no los utilizas con constancia da igual lo que te pongas: Los míos, o los de otra marca. Al final se trata de ser conscientes de que cuidar nuestra piel, que es el órgano más grande que tenemos, es primordial.

P.: En redes sociales asistimos a un bombardeo de productos, entre ellos, los de belleza. No sé hasta qué punto es contraproducente escuchar -y probar- centenares de recomendaciones distintas.

R.: Ahora con las redes sociales tenemos tal cantidad de información que, al final, yo siempre pienso en la credibilidad y en seguir a gente que va a poder aportarme cosas serias y efectivas. Sobre todo y lo más importante, porque las han probado bien.

P.: Lleva más de 30 años trabajando y es una de las modelos más reconocidas del país. ¿Es posible que la aparición de la figura del influencer haya mermado la popularidad de las nuevas modelos y, además, haya impedido que se bajen del trono las que, como usted, surgieron en pleno bum del sector, entre los 90 y los 2000?

R.: Es verdad que nosotras empezamos a trabajar en un momento en el que estaba el bum de las supermodelos. Era una etapa en la que, por fortuna, se nos daba mucha visibilidad. Fuimos una generación de españolas que, unas más y otras menos, pero todas trabajamos muy bien. También hemos tenido mucha capacidad de trabajo para seguir avanzando y que se nos siga considerando referentes de la moda española. No veo a una influencer como competencia, hace otro tipo de trabajo. ¿Generaciones nuevas de modelos? Yo creo que es muy difícil y no solo hablo de España. Las modelos hoy en día tienen carreras mucho más efímeras. Quizá esto responde también a la manera que tenemos de vivir la vida, que es todo más rápido.

P.: Una modelo, entonces, debe reinventarse.

R.: Bueno, pero es que lo tiene que hacer todo el mundo. Cada uno en su profesión. Llega un momento en el que no puede seguir haciendo lo mismo.

P.: Hoy en día vivimos en una dicotomía: Por un lado, las pasarelas y los catálogos de moda quieren romper con los cánones de belleza y el edadismo, sin embargo, en redes sociales y, particularmente, en Instagram, impera la dictadura de la imagen perfecta. ¿Qué opinión le merece esta cuestión?

La pasarela y la moda son un reflejo de la sociedad. Ahora estamos en un momento de inclusión y la pasarela lo refleja. Me parece bien porque representa, como he dicho, a la sociedad actual y esa versatilidad en lo que denominamos belleza. Lo que ya creo que es un poco extremo es esa dictadura del filtro. Hay niñas jóvenes que se ponen filtros para hablar entre ellas… Pierdes verdaderamente la noción de lo que eres tú como persona. Hay que concienciar a las nuevas generaciones de la importancia de ser auténticos. Yo no pretendo solamente salir guapa en la foto, sino transmitir y contar una historia.

P.: Ha participado durante cinco años en el festival de Eurovisión dando los puntos de España, ¿cómo es ese momento tan breve pero emblemático?

R.: Pues, como dices, es breve y es emblemático, porque representar a mi país me hace mucha ilusión. Durante esos segundos he tenido más nervios que en una pasarela. A mí después de Eurovisión me llegaban mensajes desde Francia, desde Londres… Diseñadores que no pensabas que podían estar viendo Eurovisión y lo estaban haciendo. Es genial. Lo he hecho cinco años y estoy súper contenta, además soy eurofan.

Preguntas rápidas a Nieves Álvarez

P.: Un plato gallego.

R.: Pulpo.

P.: Una palabra que sepa decir en gallego.

Grazas.

P.: Un gallego o gallega que considere especialmente elegante.

R.: El hombre gallego es muy elegante, pero me gusta Feijóo.

P.: ¿Qué impresión tiene de los gallegos?

R.: La mejor gente. Tengo muchos gallegos amigos en mi vida. Muchos.

P.: Un rincón favorito de Galicia.

R.: La Toja.