El 24 de diciembre de 2022, la noticia de que un autobús se había precipitado por un puente a la altura del municipio de Cerdedo-Cotobade (Pontevedra) conmocionó a toda la comunidad. El accidente se saldó con siete fallecidos y dos heridos, el conductor del vehículo y una pasajera. Entre las causas que provocaron el siniestro se barajan las desfavorables condiciones meteorológicas de aquella noche.
Hoy, casi medio año después del suceso, el Ministerio de Transportes del Gobierno de España ha llegado a un acuerdo para la declaración de emergencia de las obras de reparación y sustitución del sistema de contención de vehículos del viaducto de Vichocuntín sobre el río Lérez, donde ocurrió el accidente; concretamente, en el punto kilométrico 66+900 de la N-541.
El Ministerio destinará 1.101.764,68 euros a subsanar "la situación de grave peligro existente" en la carretera, que quedó dañada aquella Nochebuena. La caída del autobús produjo "daños de gravedad en los sistemas de contención de vehículos existentes en el lateral derecho de la estructura, que implican un grave riesgo para la vialidad y la seguridad vial", tal y como detalla la Subdelegación de Gobierno en un comunicado.
Así, ante la grave situación existente en ese tramo de la N-541, la Demarcación de Carreteras del Estado en Galicia estima necesario acometer de inmediato determinadas actuaciones de inspección y reforma. El plazo estimado de ejecución de las obras de 6 meses, contados a partir de la fecha de inicio.
Pacto de Pedre
Tras el siniestro del 24 de diciembre, siete alcaldes de municipios por los que transcurre la carretera N-541 firmaron un pacto para demandar mejoras en el vial, denominado el ‘Pacto de Pedre’.
Concretamente, el pacto fue firmado por la alcaldesa de Boborás, Patricia Torres; y los regidores de Beariz, Manuel Prado; Punxín, Manuel Vázquez; Maside, José Manuel Iglesias; O Carballiño, José Fumega, O Irixo, Manuel Cedeira y el de Cerdedo-Cotobade, Jorge Cubela.
El entonces delegado del Gobierno central en Galicia, José Miñones, acusó a los regidores de "oportunismo político" y defendió la inversión que se había realizado desde el Ejecutivo en la N-541. Miñones recalcó que la carretera "estaba recientemente asfaltada y en buenas condiciones de visibilidad".
Asimismo, expresó que al margen de las causas del accidente, que ya adelantó que tardarían en esclarecerse, "a través de las partidas presupuestarias dedicamos cada año más porcentaje a la conservación de carreteras". Esa postura también fue defendida en su momento por la exsecretaria de Estado de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Isabel Pardo de Vera.
Acuerdos para la A-52 y la A-55 en Pontevedra
El Ministerio de Transportes también ha hecho públicos este martes otros acuerdos para mejorar diferentes viales de la provincia de Pontevedra. Destaca la partida de 3,8 millones de euros destinada al tramo de la autovía A-52 comprendido entre los puntos kilométricos 281+800 y 297+250. La obra se ha declarado de emergencia ante el riesgo grave para la seguridad de los conductores que resulta el estado actual del vial.
Las deficiencias de la A-52 están originadas principalmente "por el deficiente drenaje de la subbase, capacidad de desagüe y el estado del firme en tramos aislados", como apunta el Mitma. Los trabajos se prolongarán nueve meses desde su fecha de inicio.
Por otro lado, se invertirán 397.264,09 euros en obras de reposición y sustitución del sistema de contención de vehículos del margen derecho de la calzada del puente sobre del río Louro, en el punto kilométrico 14+000 de la autovía A-55.