Puede que, para algunos, solo sea fútbol, pero lo cierto es que este deporte supone para muchas personas comunidad, unión, cultura y tradición. No hay que irse muy lejos para comprobar que el llamado deporte rey y lo que es capaz de generar a su alrededor posibilita que los aficionados vivan eventos únicos como el que este fin de semana tendrá lugar en una parroquia ourensana de algo más de 200 habitantes: Cualedro.
Este lugar, que conforma, a su vez, un Concello más amplio de algo más de 1.600 habitantes, atesora una peña celtista con 25 años de vida. La efeméride no merece menos que una gran fiesta con bendición de bufandas, torneo de futbolín y una gran comida popular, algo que su directiva ha organizado para este mismo sábado.
Esta peña tuvo su origen en una decena de aficionados del pueblo que, a finales de los 90, puso la primera piedra de la comunidad. Se eligió, para bautizarla, el nombre de la leyenda más arraigada de Cualedro, "A Mao Negra" -se dice que, hace muchos años, una mano negra amedrentaba a los habitantes de este lugar-.
Quizá por la vinculación de Ourense con Vigo, la percepción de los peñistas es que la provincia se inclina, en la mayoría de los casos, hacia el club olívico: "A maioría somos de Cualedro, pero a peña tamén ten xente doutros pobos do concello e de comarcas próximas. Tamén de Madrid e de fóra, hai socios de todos os lados", cuenta Eduardo Carnero, uno de sus integrantes. "Nós aquí aceptamos a todo o mundo que sexa do Celta", añade.
Desplazamientos por toda España
Cada fin de semana se pasa "lista" en Balaídos para contabilizar a los peñistas que, a su vez, participan cada año en, al menos, dos desplazamientos por el resto del país.
Entre los grandes recuerdos de los peñistas en estos viajes se encuentra la agónica final de copa ante el Zaragoza en el Vicente Calderón, y la vivida en Sevilla -también ante el Zaragoza- con el equipo más emblemático del Celta: Aquel que tenía en sus filas a Mostovoi, Karpin, Caballero, Juanfran o Catanha. "Os autobuses ían cheos", rememora Eduardo.
Una peña abierta a todo el que quiera unirse
En A Mao Negra están convencidos de que su labor también es muy importante a la hora de dinamizar y activar un pueblo como Cualedro: "Sempre se fai algún acto cultural ou monólogo. Este ano, por exemplo, contaremos con actor e humorista galego Víctor Fábregas", remarca Eduardo.
Precisamente, aunque algunos socios no podrán acudir a la comida de este sábado, lo cierto es que se llegará a los 135 comensales. Y es que la cita también está abierta al resto de vecinos que deseen sumarse a pesar de no ser socios. "Apuntouse moita xente que non é socia", precisa el peñista. "Moita xente vén ao pueblo polos eventos que organizamos na peña. A xente anímase a vir facer actividades", anota.
El peñista más joven ronda los diez años y, el mayor, roza los 80. Con esta peculiaridad seguro que esta comunidad de celtistas llegará a celebrar otra efeméride: La que marquen sus 50 años de vida.