La reforma del estadio de Balaídos es uno de los caballos de batalla en la relación Celta-Concello de Vigo, ahora personificada en la nueva grada de Marcador. Desde el Gobierno local, se presentó a los medios como una obra terminada y preparada para abrirse el 11 de marzo ante el Rayo Vallecano. Lo cierto es que uno de los fondos del estadio sigue vacío a un mes de terminar la temporada.
La transformación de Marcador también se calificó como "la acción más importante del Centenario del Celta" por Abel Caballero, que le añadió la palabra Centenario como apellido para bautizarla en honor al 100 cumpleaños del Celta.
Desde el club ya se mostraron reacios en un primer momento a este nombre "impuesto" y hoy lo han ratificado anunciando que será la afición del Celta el que decida cómo se llamará de manera oficial el, de momento, único fondo reformado de Balaídos, una fórmula que ya empleó con éxito para dar nombre a la Ciudad Deportiva Afouteza de Mos.
De hecho, el bautismo por parte del celtismo era una de las iniciativas previstas por el aniversario del club, por lo que ha obviado el bautismo oficioso del Concello para ceder al aficionado el honor de poder elegir cómo se llamará el nuevo graderío y hacer real el lema de "el Centenario es para todos".
En una primera fase, ya en marcha, se podrá proponer aquí el nombre con una sola restricción: no puede ser un nombre propio, por lo que parece que queda descartado cualquier homenaje personal a jugadores históricos o fundadores del club. La posibilidad de mandar una propuesta estará disponible hasta el próximo domingo a las 00:00 horas.
Entre los recibidos se hará una selección que será ofrecida a la afición para que, de nuevo a través de una votación, elijan cómo se llamará la nueva grada.