En Vigo los ciudadanos tienen la oportunidad de aprender a gestionar su propio huerto urbano. El proyecto Camiño a Camiño de la Concellería de Medio Ambiente es una iniciativa de educación medioambiental. Entre otro tipo de actividades, dispone de una propuesta de huertos-escuela.
La iniciativa está destinada a la población mayor de edad empadronada en Vigo o a menores acompañados y residentes no empadronados, teniendo en el tercer caso menor disponibilidad y entrada directa en lista de espera. Es completamente gratuito y para participar simplemente hay que inscribirse llamando al servicio de atención telefónica del Ayuntamiento de Vigo de lunes a miércoles. En el caso de los no empadronados la inscripción debe realizarse los jueves.
Organizada en tres niveles, la actividad comienza con la asignación de una parcela. Los participantes de primer nivel aprenden los conocimientos básicos para gestionar de manera autosuficiente su propio huerto a través de un cursillo. Una vez aprendido lo necesario, la actividad consiste en cuidar de la parcela a lo largo del año, siguiendo el calendario de siembras y transplantes proporcionado por la Concellería.
Vigo apuesta por el cultivo urbano
Actualmente en Vigo hay 6 huertos urbanos activos: Fontáns (Ramón Nieto), Camelias, Sardomela (CEIP Sello), Pedro Alvarado (Teis), Casa da Xuventude y Navia (en fases I, II, III).
El huerto de Navia es el más extenso, con una superficie de 3.500 metros cuadrados, seguido por el de Fontáns con 3.000 y el de Pedro Alvarado de 2.000 metros cuadrados. Los huertos en fase dos y tres permiten a los participantes de la actividad una mayor autosuficiencia y libertad a la hora de cuidar su parcela.
Durante el confinamiento se prohibió la entrada de los usuarios a los terrenos, pero en el mes de mayo los huertos-escuela volvieron a abrir sus puertas. Debido a la pandemia se ha reducido el aforo de 60 a 20 personas en turnos de hora y media y también es necesario llevar el material propio de trabajo.
Un éxito entre la ciudadanía
Cada vez son más las ciudades que se suman a esta iniciativa que despierta un gran interés. Este tipo de proyectos ayudan a paliar el constante ajetreo de la ciudad y favorecen el contacto con la naturaleza entre la población urbanita. La importancia que le dan las personas a conocer los alimentos que entran en su casa es cada vez mayor, y los huertos urbanos son una alternativa ecológica para controlar lo que se come. En Galicia, Vigo destaca por la proliferación de estos proyectos, que ya cuentan con una extensa lista de espera.