Ministro durante la dictadura franquista, (casi) candidato a la presidencia durante la Transición y emblemático político gallego durante la democracia. Manuel Fraga Iribarne es, sin duda alguna, una de las figuras más conocidas de la historia política gallega por sus acciones tanto dentro como fuera de las fronteras de la comunidad.
Esta fue la idea que llevó a Esther F. Carrodeguas y Xavier Castiñeira, directores de ButacaZero, a querer escribir una obra de teatro sobre su figura. Lo que comenzó como una idea inalcanzable se ha ido transformando en un espectáculo "de alta comedia" en el que Iribarne es un personaje omnipresente, "que dice las verdades sin condón" y que sabe transformarse para adaptarse a la política cambiante de una España que tuvo que reaprender a ser democrática.
"En 2022 se cumplían diez años de la muerte de Fraga y cien de su nacimiento, es un político que marcó Galicia y pensé que daría mucho que pensar", explica Esther Carrodeguas, escritora de la pieza. La idea, sin embargo, quedó en un cajón "por su complejidad", pero renació el verano pasado tras un viaje por el Levante español. "Nos dimos cuenta de que el Fraga ministro de Información y Turismo tuvo muchísima influencia en otros lugares de España, así que recuperamos la idea como una forma de descrubrir la relación entre Galicia y España y también de conocernos mejor".
Así comenzó esta aventura "coral", en la que participa el gran equipo formado por ButacaZero y capitaneado por la propia Carrodeguas y por Xavier Castiñeira, director de la pieza bautizada como Iribarne. "La idea, desde el principio, no fue hacer un biopic, sino dialogar con Fraga sobre su historia y generar distancia desde la comedia", explica la dramaturga. "Hay trozos de su vida, claro, pero no es realista y está hecho en clave de comedia".
Iribarne, el personaje polifacético
La elección del segundo apellido del político como título de la obra, por supuesto, no es al azar. "Claro que la gente de una generación va a hilar enseguida quién es, pero quería hacer una pieza que se entienda por sí misma, aunque no conozcas a Fraga", dice Esther Carrodeguas. "La idea es recorrer su biografía en tres partes: como ministro de Turismo del franquismo, como casi candidato a la presidencia en la Transición y su etapa gallega".
La importancia del personaje, que estará interpretado "por la totalidad del elenco", se la da precisamente esa ideología "muy de derechas y muy de dictador, siempre imponiendo su autoridad" que lo acompañó toda su vida. "En Galicia conocemos a un Fraga y en el resto de España conocen a otro", insiste la escritora: "por eso estamos haciendo un esfuerzo muy grande para que sea interesante para todas las generaciones y todas las ciudades: quiero que salgas de ver la obra con curiosidad por saber más, que genere debate y que represente a ese personaje muy español y mucho español".
El diálogo que Carrodeguas quiere crear, además, no será el mismo dentro y fuera de las fronteras gallegas, por lo que se plantea incluso la posibilidad de que haya dos obras adaptadas. "Estrenamos en el Centro Dramático Nacional, en Madrid, en octubre y a Galicia llegaremos en enero, por lo que puede que haya dos obras en función del diálogo que se establezca con el público: no puedes profundizar tanto en determinadas explicaciones sobre el personaje en Galicia porque los gallegos sabemos muy bien quién es Fraga, algo que quizás en Madrid no ocurra".
La irreverencia como semilla del debate
"Tenemos muchos Fragas porque todo el espectáculo es un juego escénico; incluso en un momento tenemos cinco Iribarnes sobre el escenario para demostrar que Fraga era omnipresente y podía estar pescando en un sitio, cazando en otro y firmando papeles en un tercero", ríe Esther Carrodeguas. Su idea para retratar al político más conocido de la historia gallega reciente ha dado como resultado una pieza teatral "para todos los públicos, pero con el foco puesto en la gente joven con mucho sentido del humor".
"El lenguaje de la obra es muy contemporáneo para hacerlo atractivo a los jóvenes, que son los que menos entran en el teatro", insiste la dramaturga. La elección del intérprete del tema central del espectáculo, de hecho, sigue esta línea: Berto es quien canta Who the f*uck is Iribarne?, en "una apuesta clara de la producción por meter a quienes le escuchan en el teatro, aunque la obra es totalmente adulta".
El resultado es una pieza "irreverente, que probablemente eche sal a algunas heridas que no están curadas, porque recorremos la Guerra Civil, el Franquismo y la Transición", reconoce Carrodeguas. "Debería ser polémica porque buscamos abrir ese diálogo en un formato de comedia, además, que es difícil de entender".
En octubre, lo que nació como un proyecto de investigación, se subirá al escenario de la Sala Francisco Nieva del Teatro Valle Inclán del Centro Dramático Nacional el próximo 12 de ocrubre de la mano de Mónica García, Xurxo Cortázar, Anxo Outumuro, Lidia Veiga, Jorge Arcos y la propia Esther Carrdeguas, que interpretarán a cinco Fragas diferentes pero igual de divertidos.