Los acusados de introducir hachís en Vigo reconocen los hechos y eluden la prisión

VIGO, 30 Jun. (EUROPA PRESS) –

Los tres acusados de adquirir hachís en Algeciras y transportarlo hasta Vigo han reconocido los hechos en una vista de conformidad celebrada este jueves en la sala de lo Penal 2 de la ciudad olívica, y eluden el ingreso en prisión debido a su condición de toxicómanos.

Así, las partes han alcanzado un acuerdo, de manera que el cabecilla del grupo, Yerai P.V., ha aceptado 4 años de cárcel; mientras que los otros dos procesados, Marco Antonio P.S. y Daniel P.G., que fueron interceptados por la Policía cuando llevaban más de 27 kilos de hachís en un coche, han aceptado 3 años de cárcel cada uno.

Asimismo, se le ha impuesto a cada uno de los acusados una pena de multa de 300.000 euros, todo ello por un delito de tráfico de drogas, con el agravante de reincidencia en el caso de Yerai.

En todo caso, la jueza, previo acuerdo de las partes, ha aceptado conceder la suspensión de la ejecución de la pena de prisión con la condición de que ninguno de ellos delinca en los respectivos periodos de la condena, y de que completen los tratamientos de deshabituación de drogas que están siguiendo.

Según el escrito de acusación pública, el cabecilla de este grupo, que tiene antecedentes por tráfico de estupefacientes, estaba siendo vigilado por la Policía, y así fue como los agentes averiguaron que había establecido un sistema de distribución de hachís que previamente adquiría en el sur de España, y para lo que contaba con la colaboración de los otros dos acusados.

Fruto de las pesquisas, las fuerzas policiales pudieron interceptar a dos de los miembros del grupo en marzo de 2021, cuando regresaban precisamente de uno de esos viajes desde Algeciras. Al inspeccionar el vehículo, los funcionarios encontraron en varias ‘caletas’ (habitáculos disimulados en el interior de la carrocería del coche) 28 bolsas que contenían más de 2.700 bellotas de hachís, con un total de 27,5 kilos de esta droga.

Asimismo, en el registro de la vivienda del responsable de coordinar el transporte y de dirigir la venta (que fue detenido dos días después tras huir y hospedarse en un hotel con un nombre falso), los agentes se incautaron de material relacionado con el tráfico de drogas, así como tarjetas de teléfonos prepago, y diversa documentación.

Inicialmente, el ministerio público solicitaba para Yerai P.V. la pena de 4 años y medio de prisión y el pago de una multa de 450.000 euros. Para cada uno de los otros dos procesados solicitaba 3 años y 9 meses de cárcel, y multa de 300.000 euros.