Desde el momento en el que Alberto Núñez Feijóo anunció que dejaba la presidencia del PPdeG y de la Xunta de Galicia para probar fortuna a los mandos del partido nacional en Madrid, todos los focos recayeron sobre él. El nombre de Alfonso Rueda, vicepresidente autonómico y eterno número dos de Feijóo, saltaba a la palestra como el señalado para recibir el testigo.
Nacido en Pontevedra en 1968, su imagen ha sido la del actor secundario que se situaba tras el protagonista en las fotografías de rigor desde el año 2006, cuando Feijóo tomó el relevo de Manuel Fraga en el Partido Popular gallego. Es licenciado en Derecho por la Universidad de Santiago e hijo de José Antonio Rueda Crespo, político de Alianza Popular y vicepresidente de la Diputación de Pontevedra con Mariano Rajoy. Al margen de la política, se sacó las oposiciones de secretario de Ayuntamiento y ejerció en la localidad lucense de Cervantes, en A Cañiza y en Cambados.
En el plano político, fue presidente de las Nuevas Generaciones del PP en Pontevedra en 1993 y jefe de gabinete de Xesús Palmou y director general de Administración Local de la Xunta entre el año 2000 y 2005. Fue el propio Palmou, según él mismo aseguró en una entrevista en COPE Pontevedra, el que le habló a Feijóo de Rueda en su búsqueda de una mano derecha para iniciar la reconstrucción del partido. En ese 2006 comenzó su recorrido como secretario general del PP y, durante los tres primeros años, su labor fue de desgaste desde la oposición al bipartito formado por PSOE y BNG al frente de la Gobierno autonómico.
Conselleiro en 2009 y vicepresidente en 2012
En 2009, el Partido Popular logró la mayoría absoluta, volviendo a presidir la Xunta de Galicia tras el breve paso de la izquierda por el gobierno. Para Rueda comenzaba una nueva etapa en la que quedaba bajo su mando la Consellería de Presidencia, Administracións Públicas e Xustiza y, en 2012, tras renovar la mayoría absoluta, sería nombrado también vicepresidente, un cargo que ha ostentado hasta ahora.
No así el de secretario general del partido, que dejó en 2016 en favor de Miguel Tellado, al que Feijóo ha nombrado en su llegada a la presidencia del partido como nuevo vicesecretario de Organización Territorial. De la Secretaría General, Rueda pasaba a presidir el PP en Pontevedra con el objetivo de remontar en dos ciudades, la capital pontevedresa y Vigo, donde BNG y PSOE, Lores y Caballero, parecen abonados al triunfo.
Su vínculo con Feijóo se refleja en que es, junto a la conselleira do Mar, Rosa Quintana, el único miembro del gabinete con el que ha contado a lo largo de todo su mandato. Además, en plena pandemia, tras las elecciones de 2020, le elevó a la Vicepresidencia Primera, tras designar a Francisco Conde como vicepresidente segundo, y le nombró conselleiro de Turismo a las puertas de la celebración del Xacobeo.
Apoyos dentro del PP
Su nombramiento como nuevo presidente del PPdeG y de la Xunta ha recibido todos los apoyos desde dentro del partido. Pesos pesados del partido, diputados y alcaldes de las cuatro provincias lo han señalado como el relevo adecuado, así como militantes populares, que han dado su visto bueno a través de las redes sociales. En el caso de la oposición, Ana Pontón, líder del BNG, ha criticado el relevo tras "13 años de desastre", mientras que Agustín González Formoso, secretario general de los socialistas, ha asegurado que tendrá mejor interlocución con Rueda y le ha tendido la mano para los "temas estratégicos". En ambos casos, eso sí, han anunciado que no apoyarán su investidura.
Entre los aspectos más destacados durante estos años de mandato, están el traslado del servicio de urgencias 061 de Santiago a una base de Emerxencias de A Estrada (Pontevedra) en 2015, que fue muy criticado desde la capital gallega; tuvo que hacer frente a una huelga indefinida de los trabajadores de la Administración de Justicia en 2018 que pedían mejorar sus condiciones de trabajo y que duró más de tres meses; y la gestión de la hostelería durante la pandemia, uno de los sectores más golpeados por la crisis que derivó del cierre de los servicios y las restricciones provocadas por el Covid.
Tras presentar más de 7.000 avales, el 29 de abril era proclamado como único candidato a la presidencia del PP de Galicia, y poco a poco ha dejado claro su mensaje. Como heredero de Feijóo, propone "continuidad" pero aportando ideas nuevas; aunque la idea más repetida es la de "unidad", de partido y de Galicia, por donde ha comenzado a trasladar su futura candidatura para renovar la presidencia de la Xunta de cara a 2024. Unidad también que ha querido demostrar tendiendo la mano a figuras importantes dentro del partido, con los que, asegura, contará de cara a la formación de su gobierno.
En el plano personal
Casado y con dos hijas, de Alfonso Rueda Valenzuela es conocida en el ámbito personal su afición al Celta, a las motos, las bicicletas y al running. Algo que se puede comprobar en su cuenta de Instagram, donde comparte habitualmente publicaciones sobre sus actividades deportivas, además de haber participado en la maratón Vig-Bay de este año a los mandos de una de las bicicletas adaptadas de Discamino.
Mientras en Madrid, la agenda mediática ya enfoca a Feijóo en su nuevo papel, en Galicia las miradas comienzan a escrutar a Rueda, que ya tiene señaladas en el calendario varias fechas: el 10 y el 12 de mayo, cuando se celebrará el pleno de investidura; y el 14 del mismo mes, que será el día en el que tome posesión como nuevo presidente de la Xunta; y los días 21 y 22 de mayo, cuando en el congreso extraordinario en Pontevedra será ratificado como líder del PPdeG.