Dolores es un nombre femenino de origen español, cuyo significado es 'aquella que sufre dolor'. Hoy, en España, 175.700 mujeres y 20 hombres celebran su santo gracias a Beata María Dolores Rodríguez Sopeña.
Esta mujer fue la cuarta de los siete hijos de Tomás Rodríguez Sopeña, un joven magistrado y Nicolasa Ortega Salomón, mujer religiosa con quien Dolores comenzó a visitar a los pobres. Su infancia fue un "lago de tranquilidad", según ella misma narra en su autobiografía.
Debido a diferentes destinos de su padre vivió en varias ciudades españolas y distintos países latinoamericanos. Estando en Almería y con 17 años comenzó a acudir a fiestas y a hacer vida social, pero descubrió que lo que le interesaba era hacer el bien a los demás. Atiendió a los pobres, especialmente a un leproso y a dos hermanas enfermas de tifus.
Su padre fue destinado a Puerto Rico y se trasladó allí con su hijo mayor, mientras que el resto de la familia marchó a vivir a Madrid. Allí colaboró enseñando la doctrina católica en la cárcel de mujeres, en el Hospital de la Princesa y en las Escuelas Dominicales. Poco después se reagrupó toda la familia en Puerto Rico, donde fundó las Hijas de María y Escuelas Dominicales para las personas de los sectores marginales.
Su obra fue reconocida en vida. El papa Pío X aprobó oficialmente la constitución del Instituto de Damas Catequistas y la reina Doña Victoria la recibió en audiencia en 1914.
Falleció a los 69 años y sus restos fueron trasladados a Loyola. En la actualidad su obra sigue viva, con presencia en 14 ciudades españolas, en seis países de Latinoamérica (Argentina, Colombia, Chile, Cuba, Ecuador y México) y en Italia.
Se mudó a Santiago de Cuba por un nuevo traslado de su padre como fiscal del rey en la Audiencia de Cuba. Allí visitó a los enfermos del hospital militar. Empezó a trabajar en los barrios periféricos y fundó con ayuda de algunas colaboradoras los Centros de Instrucción en tres barrios distintos, donde se enseñaba cultura general, el catecismo y se prestaba asistencia médica a la población más pobre, que solían ser los negros y los mestizos. Murió su madre, por lo que el resto de la familia volvió a Madrid. Su padre se retiró y falleció en 1877.
Este y otros santos son celebrados durante el 10 de enero:
San Marciano Presbítero
San Melquíades papa
San Agatón papa
San Arconte
San Domiciano
San Gregorio de Nisa
San Pablo eremita
San Pedro Urseolo
San Petronio
San Valerio
San Guillermo abad y obispo
San Juan bueno obispo