El dinero que te cuesta dejar encendida la luz roja de la televisión: es mucho más de lo que piensas

La Agencia Internacional de la Energía calcula que el gasto por dejar los aparatos en 'stand by', supone entre un 11% y un 20% de nuestra factura.

17 marzo, 2022 09:24

Cintia de la Paz

En España, cada día estamos viendo como los precios de la luz, de los carburantes y hasta los de los alimentos esenciales van en aumento. Esto ha llevado a muchas familias a tener que ajustarse mucho a la hora de añadir gastos a su economía.

Sin embargo, por mucho que nos ajustemos, vemos cómo las facturas van subiendo cada día hasta el punto de que ya no sabemos qué hacer para reducir el consumo en todos los aspectos de nuestra vida. En este artículo, te hablamos del consumo de la luz roja en tus aparatos eléctricos y qué puedes hacer para ahorrar un poco más en tus facturas.

Incrementos en el precio de la luz

Aunque pueda parecer mentira, el coste de la vida ha incrementado muchísimo en los últimos meses. Sin embargo, se ha incrementado aún más con el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania. Es por ello por lo que, cada vez que vamos a repostar nuestro vehículo, acabamos pagando mucho más. Es lo mismo que nos ocurre con la luz y el gas. Por ello, es esencial poder reducir al máximo en estos conceptos.

En el caso del gas y de los combustibles no hay mucho que podamos hacer, aparte de quedarnos más en casa y bajar la calefacción. Algo que, hasta ahora, parecía impensable. Sin embargo, tal y como han cambiado las condiciones de vida en España, cada vez son más los que optan por quedarse en casa y llevar muchos jerséis puestos. En el caso de la luz, sin embargo, sí podemos hacer algo para ir ajustando nuestros consumos y esto es lo que te explicamos aquí.

Cuidado con las luces rojas de la televisión

Hablamos de la televisión porque es lo más usado, sin embargo, hay muchas luces rojas en casa que dejas encendidas y que van subiendo tu consumo. Las podemos ver también en las regletas, por ejemplo, pero también en los ordenadores que dejamos encendidos, en las consolas, etc. Ten en cuenta que este consumo, conocido como consumo fantasma, supone entre un 11% y un 20% de nuestra factura.

Si tienes en cuenta el precio al que se paga el kWh, pronto te darás cuenta de que hablamos de más de 60 € anuales. Es por lo que los expertos aconsejan revisar todos los aparatos electrónicos y asegurarnos de que los apaguemos completamente. Sin embargo, además de este pequeño detalle, también hay otras formas en las que podemos ahorrar.

No dejes luces encendidas si no es necesario

Lo primero que debes hacer si quieres baja el coste de tu factura de la luz es ser muy concienzudo a la hora de apagar las luces. A veces estamos atareados en casa y no nos damos cuenta de la cantidad de luz que gastamos sin querer. Antes de ponerte a hacer nada en casa, asegúrate de tener las persianas subidas y aprovechar la luz solar al máximo.

Otro detalle para tener en cuenta es el uso de la luz en las estancias en las que no estamos. Incluso si estamos entrando y saliendo de una habitación, es aconsejable que apagues la luz y la vuelvas a encender cuando entres de nuevo.

Horas punta y valle: respétalas

Un detalle importante a la hora de bajar el precio de nuestra factura de la luz es respetando las horas punta y valle que varían cada día. Es un trabajo muy tedioso estar pendiente de ello, pero esencial si quieres reducir tu factura. Pese a que a veces puede ser complicado por los horarios que tenemos, es algo en lo que debemos pensar.

Algunos de nuestros electrodomésticos tienen la función de programar su inicio, como las lavadoras, por lo que es esencial usarlo. Por otro lado, muchos de los televisores modernos tienen funciones de programación de encendido y de apagado. Esta es otra de las formas en las que puedes ahorrar en tu factura.

Controla la temperatura de tu hogar

Si eres de los que necesitan la electricidad como sistema de calefacción será necesario que te ajustes un poco. Tener una temperatura de 22 grados, incrementa casi un 50% tu factura de la luz. Por ello, debes mantener una temperatura adecuada que te permita estar bien sin necesidad gastar mucho. La temperatura ideal que aconsejan los expertos es de 20 a 21 grados.

Además de controlar la calefacción, también debes asegurarte de tener un buen aislamiento. Esto es esencial para que el frío no entre tanto en casa y, por ende, para que no debas utilizar tanto la calefacción. Revisa que todas las persianas de tu hogar tienen bien las gomas y que cierran a la perfección. Además de las ventanas, también debes controlar la puerta de entrada: si quedan espacios entre el suelo y la puerta o entre el marco, puedes estar seguro de que el frío se va a colar en tu hogar y vas a necesitar usar mucho más la calefacción.

Ahora que ya sabes cuánto consume la luz roja de tu televisor y cómo puedes reducir el consumo de luz, te animamos a que pongas en práctica estos consejos. Quizá no son la solución ideal, pero lo cierto es que sí vas a notar la diferencia en lo que pagas cada mes.