España es un lugar que se ha convertido en el destino turístico perfecto para millones de personas cada año. Lo es principalmente porque es uno de los territorios del mundo que cuenta con las playas más bonitas y espectaculares. Pero su litoral tiene un valor incalculable por factores mucho más peculiares que su belleza.
En nuestro país podemos encontrar algunas de las playas más particulares y singulares de todo el mundo. De hecho, una de las más extrañas, y a la vez bonitas, se encuentra en un pequeño municipio de la provincia de Castellón, en la Comunidad Valenciana. Se trata de Alcossebre.
Si viajamos hasta allí podremos darnos un baño en un enclave único como es la Playa de las Fuentes. Esta playa es conocida porque ser un lugar casi incomparable a cualquier otro del mundo y es que podemos estar rodeados de aguas saladas, como sería lo normal, pero dándonos un baño entre las aguas dulces de sus manantiales.
¿Cómo es la Playa de las Fuentes?
Alcossebre, en la provincia de Castellón, es un municipio que esconde una de las playas más extrañas y a la vez atractivas de toda Europa. Este pueblo tiene diez kilómetros de costa, las cuales se reparten en cinco grandes playas y en varias calas salvajes, algunas de acceso un tanto complicado.
De hecho, esas cinco playas cuentan con los certificados de Calidad y Medio Ambiente. La zona en la que se encuentran sus costas son las estribaciones de la Sierra de Irta. Su influencia convierte sus arenales en pequeños paraísos donde se combinan el mar y la montaña, dotando de un valor ecológico a una zona única en todo el Mediterráneo.
Por ello, esta playa de Las Fuentes es ideal para una escapada en la que busquemos sol y tranquilidad. Sin embargo, lo realmente espectacular es que no solo tenemos agua del mar, sino también agua dulce por los manantiales que la forman. En Las Fuentes podemos darnos un chapuzón diferente gracias a un singular fenómeno de la naturaleza.
La Playa de las Fuentes cuenta con 400 metros de largo y 40 de ancho y se sitúa junto al puerto deportivo. Su nombre procede precisamente de esos especiales manantiales de agua dulce que surgen de la arena y que llegan hasta el mar. El líquido procede de un acuífero formado en el Jurásico y parte de él llega al mar a través de los manantiales de Las Fuentes y también alcanza la zona de arena de la superficie. En este punto podemos contemplar cómo el agua brota y burbujea mientras crea pequeñas masas de agua dulce.
Los turistas que llegan hasta esta playa cada año alucinan con este fenómeno casi paranormal de la naturaleza. Un contraste único e incomparable, ya que también podemos percibir las diferentes temperaturas del agua. Este enclave es tan particular que durante las noches de verano se convierte en un lugar perfecto para llevar a cabo competiciones deportivas como torneos de vóley-playa o de baloncesto 3x3.
¿Cómo es Alcossebre?
La Playa de las Fuentes es una de las más desconocidas de toda España y de toda Europa y a la vez una de las más especiales. Sin embargo, no es el único atractivo de Alcossebre. Este pueblo de poco más de 2.000 habitantes es un núcleo perteneciente al municipio de Alcalá de Chivert, en la provincia de Castellón. Consta de dos núcleos tradicionales, Alcocebre y Capicorp, y de diversas urbanizaciones, entre las que destacan Las Fuentes y El Pinar.
Su principal reclamo son sus playas, pero también lo hacen sus múltiples oportunidades turístico-deportivas, especialmente enfocadas hacia disciplinas como el ciclismo o el senderismo. Aunque también a la navegación por sus diferentes puntos costeros.
De Alcossebre también llama mucho la atención su gastronomía con platos típicos como la Ollas Gaspatxera, el Rostit, el pulpo con patatas, el Suquet de Peix, el conejo con caracoles o la amplia variedad de arroces. Junto a este bonito y poco masificado pueblo tenemos también el Parque Natural de Sierra de Irta, el cual forma un espacio protegido de 12.000 hectáreas ideal para una escapada de verano.