"Hola, soy Paula, una mujer convertida al Islam y claro que me han preguntado si lo he hecho por un hombre", así empieza el viral vídeo de Paula Lebrón, una joven andaluza musulmana que en su cuenta de TikTok comparte sus testimonios y experiencias tras convertirse a la religión musulmana.
En este vídeo en concreto, la tiktoker repasa los prejuicios y las injusticias a las que se ve sometida en su día a día sólo por su condición de musulmana. "Para los españoles soy un traidora y para los musulmanes de nacimiento no lo suficientemente musulmana", lamenta la joven.
Con este formato de vídeo tan viral estos días en la red china, con el que los "tiktokers" se presentan y añaden un rasgo característico de su personalidad o de su vida, Lebrón nos relata escenas de su vida cotidiana que la sacan de quicio. "Después de 8 años me siguen diciendo que si lo he hecho por moda", comenta.
Con este vídeo, que acumula más de un millón de visualizaciones en TikTok, la andaluza quiere denunciar muestras involuntarias de racismo que sufre diariamente, incluso procedentes de su propia familia. "Después de tanto tiempo mi abuelo me sigue ofreciendo lasquitas de jamón", se queja.
Algunas actitudes que irritan especialmente a esta "tiktoker" cuyo perfil cuenta con casi 200.000 seguidores, son las referidas a los prejuicios de sus compatriotas -"los españoles me dicen que estoy oprimida"- o a aquellos gestos cotidianos en los que apenas se repara: "cada vez que voy a la playa con burkini todas las miradas están puestas en mí", afirma.
El vídeo de Lebrón, que ha generado multitud de interacciones aplaudiendo su decisión vital, acaba con una reivindicación de sus orígenes -"aunque me dicen que quiero ser marroquí yo soy andaluza hasta la muerte"- y con un mensaje positivo al recordar el cariño de sus seres más cercanos ante su cambio de religión: "mi familia respeta mi decisión y me quiere tal y como soy".