Insultar a la persona que te va a perforar el cuerpo para hacerte un piercing no parece la idea más brillante del mundo, pero vivimos tiempos convulsos y el vídeo en un negocio de tatuajes de Barcelona está corriendo como la pólvora en redes sociales precisamente por eso: un discurso clasista de la clienta haciendo de menos a una profesional por sus tatuajes y su empleo. Ver para creer. Lo surrealista de la escena ha sembrado algunas dudas entre ciertos usuarios, que no acaban de creerse que exista alguien así y confían en que sea un montaje.
No obstante, lo cierto es que La Tuerta, que así se llama la piercer profesional que cuenta con más de 46.000 seguidores en TikTok, no ha dicho en ningún momento que se trate de algo preparado. Es más, ha compartido el vídeo de más de 4 minutos en su perfil valorando que "aguantar opiniones durante un directo que no he pedido en mi trabajo es mi pasión, no hagáis esto porque puede sentar muy mal. También me lo encuentro en Urgencias como paciente por parte de profesionales o tomando algo por el centro tranquilamente, pero aguantarlo en un estudio de tatus ya es...".
En las imágenes, la profesional sale de pie, mientras se ve un poco del perfil de la clienta, que está sentada en la camilla. "Una cosa es llevar un pendiente y otra es llevar todo lo que tú llevas, me parece grotesco", dice la chica por los tatuajes de La Tuerta, añadiendo que "es como una necesidad de llamar la atención" y augurando que "estas personas no consiguen trabajos". En este punto, se dirige de nuevo a ella para ponerla de ejemplo al decir que "estás trabajando en un estudio de tatuajes, pero nadie contrataría a una persona que tiene esas figuras".
"Los millonarios pueden hacerlo"
Valorando que en "la época de mis padres era un criminal una persona así", reconoce que hoy en día es más habitual; no obstante, afirma que "te mueves en un mundillo que no es precisamente el decente". "Entonces, por esa regla de tres, ¿un futbolista de Primera División que va tatuado entero no es una persona decente?", pregunta la profesional sin prever la respuesta clasista de la clienta: "Es diferente porque personas que tienen mucho dinero, que son millonarias, ya tienen una profesión, pero tú no podrás estar en nada mejor que esto", sentencia.
Defendiendo La Tuerta la dignidad de su trabajo, la clienta insiste y pregunta que cuántos años podrá seguir viviendo de hacer piercing. "No veo que te vaya a durar mucho porque no lo veo un trabajo serio", insistía la joven, como si ella misma, que iba a perforarse, se abstrajese de esa poca seriedad. Convencida además de que la gente se tatúa para llamar la atención, sosteniendo que tienen problemas de salud mental, ante las caras de la profesional todavía se atreve a afearle que la ve "pasivo agresiva" cuando le está dando su opinión porque la está "malinterpretando".
"Entiende que estás hablando de cómo voy vestida. Has venido a que yo te haga un pendiente y estás criticando mi trabajo", intenta hacerle ver la piercer a la clienta, pero es en vano: "¿Tú crees que puedes trabajar de esto y cuidar de unos hijos? No sé qué imagen se van a llevar los hijos cuando vayas al cole a buscarlos con estos tatuajes", le espeta sin la menor cautela, diciendo a continuación que era mejor zanjar el tema porque "era solo un comentario sin más" y sin pedir ningún tipo de disculpa.
El vídeo no tardó en llegar a X y provocar una cascada de críticas, siendo estas algunas de las más aplaudidas:
Por si había dudas, ya sabemos lo que nunca hay que hacer cuando nos relacionemos con los demás, pero más aun si vamos como clientes.