La salud mental está dejando de ser un tabú de un tiempo a esta parte. Bien sea porque todos la hemos empezado a valorar más desde que nos la jugamos durante el confinamiento o porque sigue habiendo señores en el Congreso de los Diputados a los que ir al psicólogo les sigue pareciendo un motivo de mofa. Sea como fuere, este avance ha propiciado que muchas personas hayan querido compartir sus testimonios en redes sociales.
Gente anónima y también famosos han explicado que tienen patologías como la depresión, la bipolaridad o la esquizofrenia. Palabras que daba miedo pronunciar. Uno de los últimos testimonios nos lo ha regalado el cantante Dani Martín, que ha publicado en sus redes sociales un texto conmovedor en el que relata qué ha sucedido para que ahora afirme que "el psiquiatra a día de hoy es mi paraíso".
Martín lo ilustra con una foto suya subido a un avión que, a las puertas del verano, podríamos imaginar que lo lleva de vacaciones al hablar de un "lugar maravilloso" por el que ha dejado la playa, pero no es así. Añade que ese sitio es donde "en estos momentos de mi vida me siento mejor, más yo, más tranquilo, más feliz":
Continúa diciendo que allí le encanta hablar, se abre en canal. "Es silencioso, cómodo, a veces paso calor, me emociono, conecto con mi infancia, con mi tristeza, con mis carencias, mis errores", admite, desvelando finalmente que se refiere a su psiquiatra. "Es un gimnasio donde la cabeza y las emociones se equilibran, se deshacen nudos, conoces de dónde vienen muchas cosas":
El músico ha hablado del trabajo de los especialistas que le ayudan, dejando claro que ni siquiera tiene una enfermedad mental diagnosticada ni busca ser un referente ni servir de ejemplo a nadie:
Además, Martín recuerda lo poco que ayuda que le pregunten si está bien y que la gente cuestione, aun sin quererlo, que necesite terapia. También rompe el mito de que los psiquiatras solo se dedican a pautar medicación: "Hacen trabajos maravillosos para ordenar los trasteros que tenemos dentro cada uno, llenos de cosas desordenadas, con polvo, descuidadas, y te enseñan a deshacerte de otras que guardamos y ya no necesitamos":
Entre las miles de reacciones que ha sustitado este alegado de Dani Martín, las de muchos psiquiatras y psicólogos que le agradecen su modo de expresarse y también las de personas como él que ven necesario normalizar acudir a profesionales como se acuden a médicos de otras especialidades, pasando por los que han recordado que la Sanidad Pública debería poner más medios en este sentido:
No es la primera vez que Martín emplea sus redes sociales para compartir cosas íntimas como esta. De hecho, contó la muerte de su hermana Miriam, que falleció en febrero de 2009 víctima de un infarto cerebral, y también muestra sin reparos los efectos de la enfermedad cutánea que padece, rosácea. Todo lo ha hecho, sostiene, por si su experiencia podía ayudar. Ahora también ha sido esa su intención: "Yo voy al psiquiatra, tal vez pueda servirle a alguien".