La candidata de Vox a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, Rocío Monasterio, ha estado esta semana en el plató de Informativos Telecinco contestando las preguntas de Pedro Piqueras. La entrevista que ha tenido varios titulares polémicos, entre ellos uno que ha provocado las mofas de sus críticos en las redes sociales, calificándolo como la enésima invención de la responsable madrileña de Vox.
Con el ánimo de rebajar el tono del cuestionario, Piqueras preguntó a Monasterio si tiene amigos de izquierdas y también le ha pedido que eligiese a algún contrincante político para irse a tomar un aperitivo para hablar sobre cualquier tema. "Yo en política no tengo amigos en la izquierda", ha dicho, explicando que "porque ellos no se quieren sentar nunca con Vox, ni siquiera para negociar. Nos han hecho un cordón sanitario durante todo este año".
Dicho esto, Monasterio ha confesado que sí tiene amigos de izquierdas a los que ha conocido gracias a su trabajo de arquitecta, en las obras: "He trabajado 20 años en obra en construcción, tengo muchos amigos de izquierdas". Lo más fascinante de su relato llegaría segundos después, cuando le ha dicho a Piqueras que "esos amigos de izquierdas se están planteando ahora votar a Vox".
Burlas por doquier
Afirmó Monasterio que sus amigos progres "han hecho un viraje y están mirando a Vox. No están dispuestos a reforzar el bipartidismo el PSOE-PP y Podemos les ha defraudado de una manera brutal, les ha engañado. Ven a Sánchez, que es lo que tiene hoy, que es lo que les está trayendo ruina, lo que les está trayendo falta de empleo":