El bailarín Nacho Duato ha conmovido a todo el país con las palabras que le ha dedicado al ganador del programa de talentos de Televisión Española, Prodigios, durante la final que se ha celebrado este pasado sábado. El joven Saïd Ramos, de solo 15 años, demostró su gran talento para la danza poniendo en escena el Andantino de Tchaikovsky, una actuación que removió los sentimientos del coreógrafo español, jurado del talent show.
Duato no pudo evitar mezclar su propio idilio con la danza a la hora de valorar al concursante, recordando sus inicios, en los que, además de las dificultades de hacerse un hueco como bailarín, tuvo que lidiar con los prejuicios homófobos de su entorno, incluidos los de su padre. Una falta de apoyo que, escuchando al bailarín, nos traslada inevitablemente a la historia ficticia de Billy Elliot, aquel niño británico que luchó por bailar a mediados de los ochenta y nos emocionó en el cine.
"No suelo hablar de mi vida, pero cuando te veo bailar pienso en algo que os voy a decir ahora: yo empecé a bailar a los 13 años, en mi casa no me dejaban, me tuve que ir a un estudio de ballet, pero no había niños", comenzaba Duato. "Yo era el único niño y, lo demás, todo niñas. Cuando salía, me tenía que poner las mallas y las zapatillas a escondidas porque los niños de mi colegio me llamaban marica y me decían 'eso es para nenas'".
"Habla como un hombre"
La carga emotiva del discurso de Duato, unas palabras que nadie esperaba en el plató, continuó cuando habló de su padre, que le decía: "Nacho, habla como un hombre". "Y yo le decía, 'pero si tengo 12 años, no puedo hablar como un hombre'". El bailarín recordó que ha bailado "desde el Bolshoi hasta la Ópera de París", enumerando los grandes escenarios que había pisado en todo el mundo para concluir: "Mi padre, en toda mi carrera, creo que ha venido a verme cuatro veces", dijo tragando saliva.
"Y cuando te veo bailar pienso en lo joven que eres, y pienso en lo que dijiste el otro día, en que quieres ganar para reivindicar el puesto del hombre en la danza. Y cuando el otro día vi a tu padre, cómo te apoyaba, yo que siempre he pasado un poco de todo, y decía que mi padre no vendría porque estaba ocupado, ahora pienso qué cosas más grandes me he perdido. Sigue adelante porque sé que lo vas a conseguir".
Duato, además, le dijo a Saïd: "Tienes mucha suerte de haber nacido en una España libre, una España democrática y no la que me tocó vivir a mí. Enhorabuena". Emocionado, el bailarín recibió un aplauso unánime del público que estaba en el plató de Televisión Española, sus compañeros de jurado e incluso del presentador, Boris Izaguirre, al que se le entrecorta la voz diciendo "bravo, Nacho".
Unanimidad en las redes
El vídeo de la valoración de Duato pronto saltó a las redes sociales, donde su mensaje se recibió con los brazos abiertos y se hizo viral en plena jornada electoral:
Las reacciones, mayoritariamente positivas, demuestran que las palabras del bailarín han logrado emocionar a todos:
Desde luego, parece que ya se ha ganado a pulso ser uno de los alegatos contra la homofobia más celebrados.
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