La La Land será recordado por todos como la película del Oscar Interruptus, por ese épico momento en el que un incomprensible error hizo que se anunciara la cinta de Damien Chazelle como ganadora del premio a mejor película solo para arrancarle la estatuilla de sus manos y otorgársela a Moonlight. Si no fuese por ese momento en el que el título de la película en Ja Ja Land, tal vez lo recordaríamos por sus escenas.
Como por ejemplo la escena inicial, la del atasco en la autopista. Barcelona lleva varios días colapsada por los taxistas, quienes protestan contra las presencias de empresas como Uber o Cabify, y reclaman una normativa prometida por Colau a cambio de que no reventasen el Mobile World Congress, una normativa que Colau sabía que no podía hacer, pero la realidad nunca ha frenado ninguna promesa vacía de un político que quiere ganar tiempo.
Así, los taxistas han decidido tomar la Gran Vía de Barcelona, invadiendo una de las principales arterias de la ciudad con sus vehículos negros y amarillos e impidiendo la circulación. Un follón, vamos. Pero un follón que algunos han decidido tomarse con humor.
El director de fotografía Pol Turrents -responsable de videoclips como La primavera de Estopa o Hijo de la luz y de la sombra de Joan Manuel Serrat-, se encontró en medio del follón y decidió hacer un poco de cine:
Eso sí, no han tenido narices de imitar también la coreografía de la película ni de ponerse a bailar sobre el capó de un taxi. Suponemos que decidieron respetar los vehículos más que el piquete que se encontró un coche de Cabify en el parking del aeropuerto...
Pero hubiera sido la guinda verlos bailar así: