La vida del guitarrista de los Rolling Stones, Keith Richards, ha sido siempre una oda a las bacanales, alcohol y drogas mediante, como siempre ha reconocido él mismo hasta convertirse en un icono de la party hard.
De hecho, suele bromearse con que parte del secreto de llegar a su edad en sus condiciones pasaría por su estilo de vida poco convencional. Ahora, Richards, ha sorprendido a propios y extraños reconociendo ante The Daily Telegraph que lleva dos meses sin consumir.
Pero, tranquilos, no es que haya decidido tomárselo con calma, no. No se ha caído un mito, más bien al contrario. El motivo de su nueva vida sana es que ha perdido interés en las sustancias porque el paso del tiempo las ha vuelto "aburridas y flojas".
"Las drogas que hay hoy en día por ahí no me fascinan lo más mínimo", ha confesado Richards, añadiendo que "se han convertido en algo institucionalizado. Además, he probado de todo en la vida, ya no hay nada que me pueda sorprender".
También abstemio
No solamente ha dejado las drogas ilegales, sino que el guitarrista tampoco está probando el alcohol. Eso sí, dice que no dejará sus dos grandes vicios: el tabaco y el café.
Con todo, Richards señala que "no digo que estoy definitivamente lejos de las drogas. En seis meses podría probarlas de nuevo". Las destilerías y los camellos, entonces, pueden dormir tranquilos.