Joey Barge decidió protestar así contra el código de vestimenta de su empresa.

Joey Barge decidió protestar así contra el código de vestimenta de su empresa.

La Jungla / Social

El joven que decidió ir con vestido a la oficina para protestar por no poder ponerse pantalón corto

En la Jungla. En Francia, los trabajadores de una empresa de transportes están llevando a cabo la misma protesta. 

22 junio, 2017 16:53

En plena ola de calor, acudir a trabajar con pantalones largos es para algunos un verdadero suplicio. Sin embargo, no queda otra. La gran mayoría de las empresas no permiten que los hombres vayan a sus puestos de trabajo enseñando las pantorrillas ya que consideran que va contra las normas mínimas de decoro y contra su código de vestimenta. No ocurre lo mismo con las mujeres. 

Joey Barge, un joven inglés de Buckinghamshire, decidió saltarse este absurdo precepto hace unos días y acudió a la oficina con unos shorts una jornada en la que el termómetro sobrepasaba los 30 grados ampliamente. Sin embargo, sus jefes consideraron que, pese al sofocante calor, su vestimenta era inadecuada y lo mandó a casa. 

Fue entonces cuando Joey publicó los siguientes tuits en su cuenta personal: "Si las mujeres pueden llevar vestidos o falda al trabajo, ¿puedo llevar yo estos elegantes pantalones cortos? Respuesta: no. Me acaban de mandar  a casa".

En lugar de acatar las normas y agachar la cabeza, Joey decidió que iba a ser un buen momento para rebelarse de una forma poco habitual. Llegó a casa, buscó en el armario y se puso un llamativo vestido rosa y negro de mujer. "¿Qué queda mejor?", se puede leer en una de los tuits en las que aparece posando frente a un espejo.

 

Camino del trabajo, el bueno de Joey se temía lo peor, así que decidió compartir una tercera foto, de nuevo en el coche, pero esta vez con su vestido. "Te veo pronto, Twitter. Estaré pronto en casa", escribió.

Según ha contado el joven al diario británico The Daily Mail, en la oficina se extrañaron al verlo llegar de esa guisa. "Me dijeron si no iba un poco demasiado colorido y me preguntaron si no quería ir a casa a cambiarme, ya que nos iban a dejar utilizar pantalones cortos debido a mi protesta", relata. "Les dije que estaba feliz de quedarme así", añade. Y así se quedó.

El último tuit que compartió el joven británico es, tal y como él mismo dice, una "victoria parcial". Se trata de un mensaje de sus superiores en el que autorizan a los trabajadores a vestir con pantalones cortos. "Debido a las altas temperaturas se ha acordado que los hombres puedan vestir pantalones cortos de 3/4". Aunque, según matizan en el correo electrónico, sólo podrán ser negros, beige o azul marino. 

No es el único caso

Joey no ha sido el único que ha decidido protestar contra el código de vestimenta de su empresa. En Francia, varios conductores de autobús y tranvía de Semitan -la empresa de transportes de Nantes-, hartos de soportar los calores de esta época del año, han decidido acudir con falda a sus puestos de trabajo. Es su forma de protestar contra la normativa que permite a sus compañeras vestir falda y a ellos pantalón corto para ejercer el mismo trabajo. 

Sin embargo, tal y como recoge la versión francesa de 20 Minutos, Semitan no ha cedido a las presiones. "Es difícil para ellos pero son sólo unos pocos días al año", explica Pascal Bolo, presidente de la compañía, que considera que dotar a los trabajadores de un nuevo uniforme con pantalones cortos implicaría un coste adicional que por el momento no están dispuestos a asumir. 

Más éxito han tenido los alumnos de la Isca Academy de Exeter. Ante la prohibición de llevar pantalones cortos pese a la ola de calor por no formar parte de su uniforme, han ido a clase vestidos con las faldas reglamentarias del uniforme de sus compañeras. Algunos, incluso, se han atrevido a depilarse las piernas.

La dirección del centro, que fue la que les retó a venir en falda si tanto envidiaban a las chicas, ha tenido que comerse sus palabras. "Viendo que el tiempo cálido es cada vez más frecuente, estoy dispuesta a plantear un cambio de cara al futuro" - ha declarado la directora Aimee Mitchell según recoge The Guardian.