La temporada taurina en Sevilla sobre el papel pinta tan bien como un pincel de Salustiano a la hora de crear un cristo "joven y bello", en el sentido de que dará que hablar. Su también creador, el empresario Ramón Valencia, se refirió a ella en su presentación como 'la Feria', ni más ni menos.
Y valga la redundancia, no es para menos. La empresa Pagés sueña con algo que, a priori, puede ser una realidad: poner el cartel de 'No hay billetes' en más de una tarde.
¿Por qué? Porque lo tiene todo, carteles 'remataos' en los que siempre se encuentra un aliciente, como le gustaba decir a don Diodoro en paz descanse; mucha presencia de figuras y ganaderías punteras, algunas ausencias y hasta polémica.
El supuesto veto de Roca Rey a Daniel Luque en los despachos, que aunque han intentado apaciguar, ha dejado fuera al de Gerena de las primeras ferias de la temporada y del Domingo de Resurrección. En cualquier caso y sea como sea, eso siempre da 'vidilla' porque somos cotillas por naturaleza.
No obstante, Valencia cogió por la calle de en medio en la presentación de los carteles: "Al margen de la buena amistad que pueda tener con el torero [Roca Rey] o su familia. Yo he preguntado y ellos preferían no torear con Luque. Y, lógicamente, me debo a ellos de alguna manera".
Hace casi un año el torero peruano dijo públicamente en una entrevista a ABC: "No quiero estar con alguien irrespetuoso en un patio de cuadrillas cuando luego me voy a jugar la vida".
La disputa, al parecer, viene de rencillas personales. Y conociendo a los dos gallos, no es de extrañar, aunque soy de las que piensa que lo mejor para todos es que lo resuelvan en el ruedo.
Su lugar en la fecha más taurina de Sevilla cuando Cristo resucite lo ocupará Sebastián Castella, que también salió por la Puerta del Príncipe el año pasado, pero hasta el Giraldillo sabe que quien tendría que estar, entre Morante y Roca, es el de Gerena por lo buen torero que es y por las horas altas en las que se encuentra. La faena que le hizo al toro 'Príncipe' del Parralejo hace casi un año superó la perfección.
El otro puntal, Morante de la Puebla, estará en cinco para la alegría de todos y por más que méritos propios. Nadie, los que estuvieron y los que se inventaron y se inventarán que estuvieron, podrá olvidar la bendita locura que provocó el de La Puebla aquel 26 de abril de 2023 cortando un rabo en la Maestranza 52 años después.
Y entre otras muchas presencias como la Juan Ortega, Borja Jiménez, Manuel Escribano, Emilio de Justo, Pablo Aguado o David de Miranda, están también algunas ausencias como Enrique Ponce. No porque el primero fuera un gran reclamo novedoso, sino porque se supone que se iba a despedir. Tampoco estará Oliva Soto quien prácticamente se veía toreando en su plaza y muchos aficionados también.
Y todo ello en una marcada Sevilla taurina, no sólo por los alamares prendidos en los trajes del Heraldo o del Rey Baltasar, sino también por el cartel que anunciará las fiestas de primavera. Este muestra a un torero, David Galván, de impoluto blanco y plata.
Lo dijo Ramón Valencia con cierta sorna: "Ya está en un cartel y es un grandísimo torero". No obstante, bien merecería vestirse de luces en Sevilla y no estar solo en un lienzo, sino sobre el albero maestrante. Torería tiene para ello.
Pero para torería la del filósofo Fernando Savater, quien lanzó un dardo brillante a aquellos que crucifican a los toros, entre los que están el ministro de Cultura, Ernest Urtasun, tras recoger su premio Andalucía de Tauromaquia. "Dentro de 50 años nadie se acordará de ellos y toros recordarán a Curro Romero". Porque, como bien sentenció Rafael 'El Gallo' sobre otro filósofo: "Hay gente pa tó".