Isabel Muñoz:

Isabel Muñoz:

Sevilla

La fotógrafa Isabel Muñoz trae a Sevilla la historia de las mujeres del Congo: "Sufren un infierno pero eligen seguir luchando"

El próximo 29 de enero inaugura en la Fábrica de Artillería la exposición 'Narrativas Ocultas', en la que retrata violaciones de los derechos humanos en dicho país.

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Isabel Muñoz (1951) se dedica a contar historias desde los 28 años. Lo hace a través de la lente de una cámara y sus protagonistas viven en distintos países del Sureste asiático o Etiopía, pero también en Cuba, Malí, Egipto o Turquía.

En su larga trayectoria, sus exposiciones han recorrido las principales ciudades de Europa, América y Asia, lo que le ha reportado un reconocido prestigio internacional.

Siguiendo esa estela, el próximo 29 de enero aterrizará en la Real Fábrica de Artillería de Sevilla con 'Narrativas Ocultas', un proyecto erigido de la mano de la fotógrafa americana Susan Meiselas.

Premio Nacional de Fotografía en 2016, la historia que Isabel reflejará en esta nueva exposición será la violencia que sufren las mujeres en la República Democrática del Congo.

Lo retrata como "uno de los peores países para nacer mujer", a pesar de poseer una de las "mayores riquezas naturales del mundo", con "minas de coltán, oro y diamantes" al este del territorio.

Quizá, reconoce, esa sea la causa del "infierno" que tienen que vivir, pues comparten el espacio físico con hasta 77 grupos armados que "las utilizan como arma de guerra".

A usted se le atribuye una frase que refleja muy bien el propósito de la fotografía y del propio periodismo. Dice así: "Una historia que no se cuenta es una historia que no existe".

Es una verdad como la vida misma. Algo que descubrí hace mucho tiempo, y el poder que tiene la imagen de generar cambios se convierte de verdad en un enganche tremendo. Somos contadores de historias, unos lo cuentan escribiendo, otros con imágenes y vídeos.

¿Existe siempre una intención de denuncia social en sus trabajos, o sólo se da a veces como consecuencia de la elección de sus protagonistas?

Yo creo que hay temas en los que sí existe esa denuncia social, pero otros en los que la historia es distinta. Pero para mí el dar a conocer esas historias es, en realidad, lo importante. 

Una de las fotografías de la exposición

Una de las fotografías de la exposición Isabel Muñoz

¿Cual es la realidad que viven las mujeres del Congo que ha retratado y que podrán ver los sevillanos en la inauguración del día 29? 

Los grupos armados que, como te he comentado, existen en este país las utilizan como arma de guerra de la manera más espantosa que te puedas imaginar. Es curioso observar el contraste entre la falta de derechos de la mujer y el sistema tribal que impera allí. 

Así, la forma de atacar a una tribu a veces es destrozando a las mujeres. Este es un trabajo en el que reflejo la realidad horrible de estas mujeres que para mí, sin embargo, son heroínas, porque eligen vivir. 

Y las que físicamente pueden vivir después tres o cuatro años en un hospital después y varias operaciones, siguen luchando por otras mujeres y por la vida. 

Retrato de la exposición de Isabel Muñoz, mujeres del Congo

Retrato de la exposición de Isabel Muñoz, mujeres del Congo Isabel Muñoz

Una segunda parte del trabajo, que también es otra de las realidades que hay en ese país, muestra todo el tema de los niños que son acusados de brujería, muchas veces por envidia de las madrastras, y que acaban en la calle de una forma horrible. Los que padecen enfermedades mentales son igualmente acusados de brujería y tratados como perros.

También reflejo en la exposición el caso de unos niños, normalmente de familias desfavorecidas, que desaparecían en ciudades de manera muy misteriosa y que luego aparecían con unos signos de violación evidentes. 

Dicho esto, y en términos generales, es un trabajo sobre las mujeres, pero con esperanza, porque si tú empoderas a estas mujeres, y ellas mismas se encargan de empoderar a otras, sí te das cuenta de que hay un futuro, y por eso tenemos que luchar. 

Al hilo de esa esperanza que acaba de mencionar, ¿ha tenido la experiencia de que su trabajo haya tenido alguna consecuencia?

Sí que la he tenido. Siempre tenemos la duda de si lo que nosotros hacemos sirve para algo, pero, precisamente este trabajo tuvo repercusión. Se expuso primero en Kinsasa -capital de la República del Congo-, y entonces dimos a conocer una realidad que la Comunidad Internacional no sabía que estaba ocurriendo.

Cuando volvimos seis meses después con Televisión Española para hacer un documental, tuvimos la maravillosa noticia de que ya no había ninguna violación de niños y niñas como las que te he comentado. 

Gracias a esta exposición, más de cien niños pueden ir en paz a la escuela. Yo creo que eso es importante. Los fotógrafos no tenemos una varita mágica pero podemos hacer que las cosas cambien contando esas historias.

¿Cómo nace la idea de traer este trabajo a la Fábrica de Artillería de Sevilla, contando además con la colaboración de la fotógrafa norteamericana Susan Meiselas?

Nace de VF Art Project, que fundó una amiga argentina en Luxemburgo, Violeta Frank. A ella y a un comisario con el que yo había trabajado también en esa ciudad se les ocurre la idea de juntarnos a las dos.

Hubo una primera parte que ya se expuso en Luxemburgo, y aquí hemos hecho algo nuevo, le hemos dado otra vuelta al tema. Aunque yo a Susan no la conozco personalmente, sí conozco su obra, y todo lo que propone Violeta a mí me encanta, desde hace años trabajamos juntas.