Sevilla tiene calles admiradas por locales y turistas. Mateos Gago, con las vistas al final de la Catedral y la Giralda. Los callejones de Santa Cruz, estrechos y misteriosos. La calle Betis, en Triana, puerta al río y escaparate de casas de colores.
Pero también tiene calles que no comparten una ornamentación o una personalidad tan marcada. Espacios urbanos más funcionales que otra cosa y que, según la inteligencia artificial, son los menos atractivos.
Porque si se le pregunta a ChatGPT cuál es la calle más fea de Sevilla, el sistema responde una vía muy concreta. Una calle de circunvalación que se creó de cara a la Expo 92 para mejorar las conexiones de la ciudad a finales de los años 80.
La calle más fea de Sevilla, siempre según ChatGPT une la zona sur de la ciudad con Nervión y el Cerro Amate. Recorre algo más de dos kilómetros y medio y divide la ciudad en el eje norte-sur.
Porque la calle más fea de Sevilla para la inteligencia artificial es la Ronda del Tamarguillo. Es, según ChatGPT, "una de las menos atractivas en términos estéticos". ¿Por qué dice eso? Porque, argumenta, "es más funcional que turística".
Tráfico rodado
Además, señala Chat GPT, la Ronda del Tamarguillo "tiene un diseño más orientado al tráfico rodado y carece del encanto arquitectónico o la belleza tradicional que se encuentra en el casco histórico de Sevilla".
Es decir, no es que la calle sea fea. Es que es una vía funcional donde hay mucho tráfico y, comparada con otras partes de la ciudad, no resulta tan atractiva. Pero eso no quiere decir que no tenga áreas con encanto.
En todo caso, señala ChatGPT, "los alrededores están marcados por edificaciones modernas y funcionales, así como áreas industriales y comerciales que no destacan por su estética".
Polígonos
En segundo lugar, ChatGPT destaca el Polígono Calonge o la Ronda Norte como las calles más feas de Sevilla. La IA señala que ambas "pueden tener una apariencia más deteriorada o menos cuidada se encuentran en barrios periféricos o de carácter industrial".
Estas vías, remata, "tienden a tener menos elementos decorativos y una planificación más práctica que estética.