La Audiencia Nacional ha condenado al hombre que intentó violar a la mujer a la que acababa de conocer en una discoteca de Sevilla a un año de prisión por un delito de agresión sexual en grado de tentativa, seis años de libertad vigilada y otros seis con prohibición de acercarse a la víctima será lo que tendrá que pagar el autor de los hechos.
Los hechos tuvieron lugar el 28 de mayo de 2022, a las 6 de la madrugada, a la salida de la discoteca Coyote situada en el Polígono Calonge, según la sentencia emitida por la Sección Primera de la Audiencia y ha reconocido el acusado.
De acuerdo con los hechos probados, la mujer había llegado al local sobre esa misma hora acompañada por amigos. Tras conversar con el inculpado en el exterior del local y mostrar interés por el vehículo del procesado -un Volkswagen Passat-, subieron ambos al mismo y se desplazaron hasta la altura del número 13 de la calle Rodio del mencionado polígono. Allí estacionó el procesado.
Este relato confirma que el autor de los hechos trató de besar a la mujer, que se encontraba en el asiento del copiloto. Pese a obtener una negación por parte de la víctima, este individuo "se incorporó en su asiento, bajándose el pantalón y su ropa interior y se abalanzó sobre ella".
El ahora condenado agarró a esta mujer por el cuello, y en el forcejeo entre ambos, ésta consiguió abrir la puerta del coche y huir precipitadamente, aunque quedó tendida en el suelo. Entonces, el procesado se situó encima de ella, con la intención de acometer la penetración y quitándole el móvil "para que no llamase a sus amigos".
La salvaron los trabajadores
Gracias a los gritos de auxilio de la víctima, trabajadores de negocios cercanos pudieron acudir a socorrerla, apartando al individuo de encima de él. Estos asistieron a la víctima, "la cual tenía subido su vestido a la altura de la cintura y su ropa interior bajada, encontrándose en un estado muy alterado y llorando". Tras ello, la Policía Nacional pudo detener a este hombre.
Para el tribunal encargado de este caso, los hechos reúnen todos los elementos para ser considerados como un delito de agresión sexual con el agravante de intento de penetración y uso de violencia. Además, esta fuerza fue incrementada en el forcejeo, donde el inculpado ocasionó varias heridas a la víctima.
Así, el autor de los hechos tendrá una pena de un año de cárcel por un delito de agresión sexual en grado de tentativa. Al ser esta condena menor a dos años, el procesado no pisará el centro penitenciario si no vuelve a delinquir en los próximos tres años.
A esta pena se le sumarán seis años de libertad vigilada post penitenciaria y otros seis de prohibición para acercarse a la víctima o comunicarse con ella. Por el delito leve de lesiones por el que también se le ha juzgado, el inculpado deberá pagar 180 euros de multa.