Condujo en dirección contraria por la autovía A-49 durante kilómetros y kilómetros. Más de 60. Los agentes de la Guardia Civil, que se percataron del conductor kamikaze, le siguieron por sus cámaras hasta que consiguieron darle el alta. Entonces vieron que, además, iba bebido.
La Benemérita explica que los hechos ocurrieron pasadas las cinco de la mañana del pasado 27 de noviembre. Entonces el destacamento de la Guardia Civil de Osuna se percató de lo peligroso de la situación y avisó al centro de mando de Tráfico.
Desde ese punto siguieron al conductor, que condujo varios kilómetros en contramano. Además, los agentes pusieron mensajes de advertencia para los demás conductores en las pantallas que tiene la A-49. Querían evitar así posibles accidentes.
Finalmente, los agentes del destacamento de Osuna consiguieron parar al conductor kamikaze. Había recorrido más de 60 kilómetros en sentido contrario. Además, al hacerle la prueba del alcohol, arrojó un resultado de 0,86, por encima del máximo.
Hasta dos años de cárcel
Además, explican desde el Instituto Armado, el hombre se resistió ante los agentes. De esta forma, explican, se le investiga "por la comisión de un supuesto delito contra la Seguridad Víal por la circulación en sentido contrario, por superar las tasas legalmente establecidas, así como por la desobediencia y resistencia a los agentes de la autoridad".
Por todos estos hechos se le puede poner una pena de prisión de seis meses a dos años y "privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta seis años", indica la Benemérita.