Dicen que el tiempo pone las cosas en su lugar, Drácula: la leyenda jamás contada es un buen ejemplo. Estrenada en cines en octubre de 2014, esta película fue destrozada por la crítica especializada, que dijo cosas como: "era mejor que esa leyenda hubiera seguido sin contarse" (The Telegraph), "es relleno para cines multisalas" (New York Times) o "es una historia de origen aburrida que intenta convertir al vampiro más famoso en Maléfica" (Variety). 

Tras haber pasado sin pena ni gloria y haberse perdido en el olvido, con la llegada del streaming y, especialmente, con su entrada en el catálogo de Netflix en el último fin de semana (donde ocupa los primeros puestos del top10) ahora está teniendo una segunda vida con estatus de película de culto que fue "injustamente ignorada" en su estreno. 

Esta película de acción y terror propone una historia de origen nueva para el legendario vampiro en lugar de utilizar el argumento de la novela de Bram Stoker de 1897, que se ha convertido en canon.

Ambientada en el siglo XV, en esta versión Vlad Drácula es el príncipe de Valaquia y Transilvania. De niño, fue pupilo real en el palacio del Sultán del Imperio Otomano y fue entrenado para ser soldado del cuerpo de élite de los jenízaros, donde se convirtió en su guerrero más temido, ganándose el apodo de 'Vlad el Empalador, Hijo del Dragón'. 

Estos orígenes del personaje son una mezcla de mitología e historia que relatan cómo se transformó el sanguinario emperador en el primer vampiro de la historia. Uno de los más terribles y sádicos personajes de Europa que inspiró la clásica obra literaria de Bram Stoker mezclando el terror sobrenatural, las leyendas y toques de romance. 

Delante y detrás de cámaras

Luke Evans es el encargado de dar vida al gran vampiro, acompañado por un reparto de lujo en el que destacan actores como Sarah Gadon (Ferrari), Dominic Cooper (Preacher) y Charles Dance (Juego de tronos). 

Está dirigida por Gary Shore, en su debut en la gran pantalla, y escrita por Matt Sazama y Burk Sharpless. Ramin Djawadi (Iron Man, Juego de tronos) es el compositor de la banda sonora.

Taquilla y crítica

Dracula Untold recaudó 56,3 millones de dólares en Norteamérica y 159,2 millones en el resto de territorios, lo que supone una recaudación global de 215,5 millones de dólares frente a un presupuesto de 70 millones.

En Rotten Tomatoes, la película tiene un índice de aprobación del 25% basado en 138 críticas con una puntuación media de 4,5/10, frente a un 58% de valoraciones positivas de la audiencia, que le otorga un 7 sobre 10.

En Metacritic, la película tiene una puntuación de 40 sobre 100 basada en los comentarios de 30 críticos. El público encuestado por CinemaScore otorgó a la película una nota magnífica nota media de "A-" en una escala de A+ a F.

Son varios los críticos profesionales que han defendido la película en los últimos años, entre ellos está Michael John Petty, que escribió en Collider un texto en 2022 en el que reinvindicó la cinta: "La forma en que Vlad lucha por su mujer, su hijo y su país es una visión completamente única del personaje que nos anima, como con el Frankenstein de Mary Shelley, a echar un vistazo más profundo e intencionado al monstruo".