Apenas lleva cuatro días en Netflix, pero 1899 ya ha protagonizado su primera polémica. La nueva serie alemana de los creadores de Dark Baran bo Odar y Jantje Friese ha sido acusada de plagio por la ilustradora brasileña Mary Cagnin, que asegura que muchos elementos de la producción coinciden con los de su cómic Black Silence, publicado en 2016.
La serie se sitúa en un barco de vapor lleno de inmigrantes europeos, que ponen rumbo a Nueva York en busca de un futuro mejor. Cuando, durante el trayecto, descubren otro barco de inmigrantes a la deriva en altamar, su viaje da un giro inesperado. Lo que descubrirán a bordo convertirá su viaje hacia la tierra prometida en un enigma de pesadilla que conectará el pasado de cada uno de los pasajeros a través de una complicada red de secretos.
El posible robo de una idea original
Tres días después de su estreno en Netflix, la ilustradora brasileña Mary Cagnin aseguraba por Twitter que 1899 es idéntica a su cómic Black Silence, que se publicó en 2016. Analizando punto por punto la recién estrenada ficción, Cagnin comparaba los planos y secuencias con las páginas de su obra, encontrando semejanzas muy sospechosas.
"Está todo aquí: La Pirámide Negra. Las muertes dentro del barco. La tripulación multinacional. Las cosas aparentemente extrañas e inexplicables. Los símbolos en los ojos y cuándo aparecen", comenzaba a explicar en el hilo de tuits.
"Os preguntaréis: ¿cómo es esto posible? Bueno, en 2017 me invitó la Embajada de Brasil a participar en la Feria del Libro de Gotemburgo, una feria internacional muy famosa e influyente en Europa", recordó Cagnin.
"Estuve en varios paneles y les pasé el cómic Black Silence a innumerables editores y personas del negocio. No es difícil imaginar que mi trabajo llegó a ellos [refiriéndose a los creadores de Dark]. No solo entregué el cómic físico, sino que también puse a su disposición la versión traducida en inglés", siguió contando.
"He llorado mucho. Mi sueño siempre ha sido ser reconocida a nivel nacional e internacional por mi trabajo. Y ver que tal cosa suceda realmente me rompe el corazón. Sabemos que en Brasil tenemos pocas oportunidades de mostrar nuestro trabajo y ser reconocidos por ello".
"Tuve la oportunidad que muchos dibujantes de historietas nunca tuvieron: poder mostrar mi trabajo a una audiencia internacional. (...) Evidentemente, Black Silence es una obra corta, casi un cuento. Es muy fácil diluir todas estas 'referencias' en las horas que abarca la serie, pero la esencia de lo que creé está ahí", zanjó la autora.
Sin respuesta de los creadores de la serie
Netflix aún no ha dado ninguna respuesta sobre el asunto, aunque se espera que tanto la plataforma como los guionistas y directores alemanes se pronuncien en algún momento. Mientras tanto, Mary Cagnin también dejó su cómic para que la gente lo lea en línea y pueda sacar sus propias conclusiones.
"Por favor, cualquiera que haya visto la serie y leído mi cómic y pueda ayudarme con la colección de similitudes, me ayudaría mucho. Más adelante pediré su ayuda para hacer llegar este caso a los medios. No podemos pensar que, por el solo hecho de ser brasileños, debamos aceptar este tipo de desdén e indiferencia. Tenemos innumerables casos de gringos que nos copian, en películas, series y canciones. Como en el caso de la película La vida de Pi que fue copiada de un libro brasileño”, comentó la autora.