Rhaenyra la Cruel, el episodio 2x02 de La casa del dragón incluyó una de las escenas más esperadas por los fans del libro Fuego y sangre de George R.R. Martin, la protagonizada por los gemelos Arryk y Erryk Cargyll, presentados en la primera temporada y separados por el enfrentamiento entre los Verdes y los Negros.
No sigas leyendo si aún no has visto el episodio. A partir de aquí habrá spoilers.
Como pasa con todos los eventos de la época, el Archimaestro Gyldayn recoge en el libro varias versiones de lo ocurrido, por lo que los lectores tenían gran expectación por descubrir cuál era la que elegía la serie, si el relato cínico y cruel de Champiñón o la más romántica que se convirtió en leyenda.
En el relato de Champiñón, la lucha "duró solo unos instantes y no hubo declaración de amor fraternal alguna". Según él, se acusaron mutuamente de traidores y Arryk murió inmediatamente, mientras Erryk agonizó con una profunda herida en el vientre "durante cuatro días en los que no paró de aullar de dolor y maldecir a su hermano".
Según los bardos, se dijeron "Te quiero, hermano" "Y yo a ti", antes de desenfundar sus espadas, y tal como cuenta el gran maestre Munkun, "se hirieron mortalmente entre sí y murieron uno en los brazos del otro con las mejillas surcadas de lágrimas.
Y es justo aquí donde La casa del dragón le hace un guiño a Sansa Stark de Juego de tronos.
El duelo fraternal en la serie
Haciendo gala de su más profunda hipocresía, Criston Cole decide trasladar la responsabilidad de la brecha de seguridad de la Fortaleza Roja en Arryk Cargyll e incluso osa acusarlo de falta de honor por llevar los bajos de la capa blanca manchados de barro. A continuación, envía al guardia a Rocadragón con la misión de hacerse pasar por su hermano gemelo, Erryk, para llegar hasta Rhaenyra y asesinarla.
Arryk consigue llegar hasta la habitación de la reina, pero es interrumpido por su hermano Erryk, dando lugar a un enfrentamiento inevitable en el que ambos están dispuestos a morir rindiendo honor al juramento de lealtad que hicieron, uno a Aegon y el otro a Rhaenyra.
Al final, como relataron los bardos y el Gran Maestre Munkun, los hermanos se dijeron que se querían y se abrazaron hasta que Erryk le dio la muerte a Arryk y procedió a clavarse mortalmente su espada tras pedir perdón a la reina.
La conexión con Sansa
Esta versión romántica de la historia que los trovadores convirtieron en leyenda, es la misma que recuerda Sansa Stark en el capítulo 41 de Choque de reyes:
"El Príncipe Tommen sollozó. 'Maúllas como un niño de pecho', le siseó su hermano. 'Se supone que los príncipes no lloran'.
"El príncipe Aemon el Caballero del Dragón lloró el día que la princesa Naerys se casó con su hermano Aegon", dijo Sansa Stark, "y los gemelos Ser Arryk y Ser Erryk murieron con lágrimas en las mejillas después de que cada uno hiriera de muerte al otro".
Según reveló Ryan Condal a The Hollywood Reporter, siempre le fascinó la historia de estos dos hermanos precisamente porque era una historia que Sansa idealizaba en los libros de Canción de hielo y fuego:
"Sansa tiene esa visión romántica tan propia de cómo fue esa pelea y de cómo se batieron en duelo durante horas, como si fuera el duelo de La princesa prometida. Tenemos a dos personas que se encuentran en bandos diferentes de este conflicto y no saben qué hacer con este juramento. Creo que eso hace que sea más trágico ver a estos dos hermanos que intentan mantener su juramento, pero que se encuentran literalmente en un combate mortal entre ellos para defenderlo".