El paisaje mental de Riley es una de las partes más complejas y fascinantes de Del revés. Y la secuela de la película de Pixar, que acaba de estrenarse en cines, introduce un nuevo elemento justo cuando la protagonista se adentra en la complicadísima etapa de la adolescencia.
Se trata del Sistema de creencias, un rasgo importantísimo en la mente de Riley, y una parte que influye enormemente en su desarrollo y en su personalidad. El hecho de que piense que es "una buena persona" o que no tiene el valor suficiente puede ser crucial a la hora de tomar decisiones y era esencial definir correctamente este aspecto en la nueva película.
De hecho, esto mismo era algo que el director de la película Kelsey Mann y su productor Pete Docter reconocieron tenían bastante claro. Así lo explican en la entrevista que concedieron a SERIES & MÁS | EL ESPAÑOL antes del estreno del largometraje en cines.
En la mente de Riley
Tal y como vimos en la primera película, el sistema de creencias de Riley está muy bien construido, y es por ello que los creadores de Del revés 2 quisieron profundizar en este universo, ampliando esta gama de conceptos abstractos.
"Creo que eso es lo mejor de este mundo y lo que hizo que la primera película fuera así, el hecho de que eligieran un concepto como el de los recuerdos. Es algo con lo que todos nos podemos identificar, pero no todos sabemos cómo se ven y cómo funcionan en realidad", observó el director Kelsey Mann.
"Todo esto es mucho trabajo, pero contamos con todo un equipo de personas realmente talentosas que nos ayudan a descubrir cómo funciona y cómo se ven. Y ha sido muy emocionante expandir ese mundo y ese vocabulario ahora que Riley es adolescente".
Mann siguió ampliando esta idea, explicando cómo fue seguir explorando la historia en Del revés 2. "Nos planteamos cuáles son las cosas por las que pasan los adolescentes. Estás empezando a formar quién eres como persona y a formar tus propias creencias. Y dijimos '¡creencias, el sistema de creencias!'. Había que mostrar el sistema de creencias".
"Lo hicimos contando con todo un equipo dirigido por nuestro diseñador de producción, Jason Deamer. Hicimos múltiples versiones de cómo era y terminamos en un lugar que me entusiasma mucho. Es uno de mis escenarios favoritos de toda la película, porque creo que no sólo es realmente hermoso, sino que también puede ser muy emotivo. Creo que mucha gente puede identificarse con él", concluyó.
"En realidad, ese es el desafío de la película", añadió Pete Docter. "Si le cuentas a la gente la idea, pedirán que se la expliques. Pero si se la muestras, lo tendrán claro. Nuestro trabajo era dejarlo todo claro a nivel visual".