La última película que protagonizó en solitario el Capitán América fue Capitán América: Civil War (2016) y aunque por el momento no volveremos a ver a Chris Evans portando el escudo, ya fue revelado quién será el elegido para sucederle.
Se trata de Sam Wilson (Anthony Mackie), que ya fue capaz de ponerse en la piel del superhéroe en Falcon y el Soldado de Invierno y que volverá a hacerlo muy pronto en la película que se titulaba originalmente Capitán América: New World Order y que recientemente ha modificado su título a Capitán América: Brave New World.
El nuevo largometraje de la Fase 5 del Universo Cinematográfico de Marvel -que se estrenará el 3 de mayo de 2024- cambió de nombre de forma repentina y después de muchas críticas recibidas por parte del público, pero hay una teoría de la conspiración que podría estar detrás de la decisión de renovarlo finalmente.
Un título lleno connotaciones
Aunque pueda parecer disparatado, existe una teoría que ha empezado a circular y que podría explicar por qué el título de la película pasará a llamarse de otra manera. Resulta que el anterior nombre podría estar haciendo referencia a la conspiración relacionada con el Nuevo Orden Mundial, una idea de que existe un gobierno mundial secreto que mueve los hilos.
Este sistema podría tener un estrecho vínculo con ciertas creencias antisemitas y defiende que los judíos están manipulando a la sociedad en secreto para enriquecerse.
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El concepto de Nuevo Orden Mundial no siempre se utiliza con ánimo de lanzar un discurso antisemita, pero su relación con el mismo es tan frecuente que resulta casi imposible desvincular un concepto del otro. Y teniendo en cuenta la evolución histórica de la humanidad, resulta peligroso hacer referencia a él, especialmente si lo hace alguien como el Capitán América.
El Capitán América se identifica con valores como la justicia, el patriotismo y la protección al más débil, y también representa lo que debería ser Estados Unidos. Incluso cuando el país no esté a la altura de esas expectativas y el mundo amenace con derrumbarse, el Capitán América siempre se esfuerza por hacer del mundo un lugar mejor.
Por eso, no sólo resulta incompatible asociar a este personaje en la misma frase que algo como el Nuevo Orden Mundial, sino que además resulta perjudicial para el superhéroe y lo que representa, incluso aunque sea alguien ficticio.
En un momento como el actual y con el auge del antisemitismo e ideologías extremas, está más que justificada la modificación que ha hecho Marvel, incluso aunque haya tardado quizá demasiado en darse cuenta de ello, ya que sería algo irresponsable ignorar lo que implica la posible mínima asociación entre el Capitán América y el Nuevo Orden Mundial.
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El estilo que tiene Marvel de contar historias suele ser alegre y muchas de ellas son capaces de proporcionarle a su público una vía de escape al mundo real. De hecho, esta búsqueda de evasión también puede haber sido un aliciente para modificar el nombre de Capitán América 4, porque aunque el recién inaugurado Multiverso no conozca límites, no parece una buena idea darle alas a ideas que no deberían tener cabida en el UCM.
El significado del nuevo nombre
Brave New World es el nuevo título que tendrá la película y hace referencia a la novela homónima de Aldous Huxley, un libro que se suele mandar como lectura obligatoria en Estados Unidos para hablar de la distopía como concepto.
La historia que cuenta tiene lugar en una sociedad futura llamada Estado Mundial donde, desde que nacen, las personas se ven obligadas a reprimir tanto sus emociones como su individualidad. Se venera a la ciencia y se utiliza la eugenesia para crear una "sociedad perfecta". No obstante, el sistema sigue siendo defectuoso.
Con este nuevo nombre, se mantiene la esencia del largometraje y también, al ser una referencia literaria, se le añade más peso a nivel temático. Además, el título adquiere un significado doble, porque hace referencia a una distopía y también a la llegada del nuevo Capitán América.
A partir de ahora, el protagonista tendrá que hacer frente a un universo cada vez más distópico y, con el nuevo título, no sólo se eliminan las connotaciones negativas, sino que también se sigue cumpliendo el objetivo de referirse al nuevo rumbo que tomará la saga del superhéroe a partir de ahora.