La sede del ministerio de Cultura parecía el estreno de una película del cine español. Allí hacían cola para entrar Bárbara Lennie, Carolina Bang, Agustín Almodóvar y productores como Enrique López-Lavigne, José Antonio Félez y Gerardo Herrero para no perderse la toma de posesión como Beatriz Navas como nueva directora del ICAA.

La expectación era máxima. Por primera vez en mucho tiempo la máxima responsable del cine español en el Gobierno era alguien vinculado al sector. Navas es investigadora y ha sido durante años programadora de La Casa Encendida, donde conoció al Ministro de Cultura José Guirao, y desde donde defendió el cine más autoral realizado en nuestro país.

Ahora le tocará sacar la cara por toda la industria, protegerla y convencer a Hacienda que sin una partida más grande de dinero el cine español seguirá agonizando esté quien esté en el cargo. Su antecesor, Óscar Graefenhain, también estaba en el acto, y tanto Navas como José Guirao reconocieron su gran labor al frente del Instituto de la Cinematografía. Tras el acto protocolario se oía en los corrillos que era la primera vez que se aplaudía a un responsable del ICAA.

Guirao no ha esperado a que lo contara la propia Beatriz Navas, y en su presentación ya ha anunciado que uno de los fuegos urgentes que tenía que apagar su cartera ya ha sido extinguido. Mañana se publicará por fin la orden ministerial con el nuevo sistema de puntos con el que se desbloquea las ayudas a la producción de este año. Con su publicación ya se podrá realizar la única convocatoria de 2018.

Más tarde, en un encuentro con periodistas, Navas, que vestía un broche en honor a Yvonne Blake, ha marcado cuáles son las tres medidas urgentes que tendrá que tomar antes de meterse en otros asuntos. Uno era la publicación de esa orden, que será casi en su totalidad el borrador acordado por la industria con algunos cambios como “el 10% dedicado al cine experimental” dentro de las ayudas selectivas. Se confirma también que los puntos de las mujeres subirán del 4 al 7 en las ayudas generales. Navas no ha dudado en subrayar que esto es gracias al trabajo del exdirector, que antes de marcharse dejó los deberes hechos.

Navas, que pedía un poco de piedad a la prensa, ya que “me acabo de incorporar”, atacaba la segunda bomba a desactivar: la Filmoteca. “Hay que encontrar un director o directora, porque hay mucho trabajo por hacer y un problema con el tema de la restauración y la catalogación, porque no hay trabajadores suficientes”, ha explicado y avanzado que el elegido será un funcionario pero que se tiene que reunir y hablar para ver quién acompaña a Carlos Reviriego al frente de la institución.

El tercer punto es el incremento del fondo de protección. Tal como avanzó este periódico, el exdirector del ICAA había logrado el compromiso de aumentar la partida para las ayudas en diez millones. Un dinero que llegaba de educación, en un movimiento sencillo ya que ambos compartían la misma cartera. Con la independencia de los ministerios se ha complicado el asunto, y Navas ha sido sincera al explicar que no puede “garantizar que esto salga adelante”, aunque ha prometido trabajo y esfuerzo.

Cuando eso se logre será el momento de tener un debate sobre “el futuro del audiovisual y el cine en España”, algo que también avanzaba antes el ministro al decir que “el mundo del cine se debate con los cambios profundos que se están produciendo” y que hace que “lo que se vea ya no sea sólo lo que está en las pantallas grandes”. “Vamos a atender a un sector en una época de cambios profundos en los que se va a trabajar, un sector que viene de una época de crisis”, zanjó Guirao.

La nueva directora del ICAA, más vinculada profesionalmente al cine “de autor”, ha defendido “a priori” el actual modelo de financiación del cine. “Responde a un intento de hacer un reparto bastante bueno y coherente con la realidad del cine español para impulsar al cine industrial y a ese que podemos llamar de autor, al documental y al cortometraje. Vamos a ver como resultan estas ayudas y después quiero reunirme con el sector y hablar mucho con ellos, que me cuenten”, ha zanjado.