Amazon Prime Video estrenó el pasado viernes la temporada número 13 de La que se avecina y los nuevos episodios de la ficción creada por Laura y Alberto Caballero ya han desatado una nueva polémica en redes sociales, relacionada con el personaje de Yoli Morcillo, al que han acusado de perpetuar la gordofobia.
Interpretado por Miren Ibarguren, el personaje de Yoli Morcillo ha caído en una depresión y come por ansiedad y a escondidas, evitando salir de casa. Su madre, María del Carmen Carrascosa, intenta ayudarla y la lleva a un endocrino para que adelgace.
No es la primera vez que la serie levanta ampollas entre los espectadores y aunque se trate de una sátira que refleja la situación social actual, los chistes que protagoniza el personaje y su situación se han interpretado como mofas y como un nuevo intento de burlarse de un colectivo oprimido.
Un giro de guion
Justificado con un salto temporal, Yoli Morcillo aparece en la serie después de romper con su última pareja. Ha llegado un punto en el que no se reconoce a sí misma en el espejo y la serie muestra el "cambio físico" que ha tenido, ya que la actriz en realidad se ha disfrazado de persona obesa para interpretar el papel.
Su trama se desarrolla en torno a su condición y aspecto físico y la serie también muestra la forma en la que su madre lidia con esta nueva realidad, llegando incluso a ponerle un candado en la nevera para evitar que siga ganando peso.
Al parecer, fue la propia Miren Ibarguren la que pidió este giro de guion en su personaje, tratando de ocultar su propio embarazo durante el rodaje de los capítulos. De hecho, la propia actriz ha compartido con sus seguidores su transformación para dar vida al personaje. Pero la decisión de seguir adelante con este cambio en el guion ha llegado a indignar a muchos de los espectadores.
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Acusaciones de gordofobia
En medio de este revuelo de indignación hacia La que se avecina, hubo un sector de la audiencia salió en defensa de la serie, pidiendo a los que se quejan que no la vean si no les gusta, porque el único objetivo es hacer gracia, no burlarse de la obesidad.
Aun así, otra gran parte de las opiniones acusaron a la ficción de perpetuar la gordofobia, utilizando fat suits -trajes de gordo o gorda- en pleno 2022, algo que parecía haber quedado en el olvido.
"Flipando con que en 2022 se recurra a un fat suit para seguir haciendo el chiste con la gordura. Pensaba que este nivel de gordofobia había quedado en el pasado (Mónica en Friends) y estábamos de acuerdo en que estaba mal, pero no, una vez más, la gordofobia sigue siendo un chiste", expresa Ashla Heartfilia en Twitter.
"No dejan de salirme clips de La que se avecina y he descubierto que la actriz Miren Ibarguren lleva un puto traje de gorda para hacer de un papel de "típica gorda que solo come mierda y está tirada en la cama todo el día" es que me parece repugnante", declaraba otra usuaria.
Otras personas fueron más agresivas que otras al expresar su opinión, como el caso de An Invernalia, que sigue insistiendo en cómo La que se avecina ridiculiza a las personas gordas en su última temporada.