Perdidos, una de las series que revolucionó la televisión y la cambió para siempre, está bajo el foco de Hollywood. Un nuevo libro escrito por Maureen Ryan, que busca exponer "patrones de acoso y prejuicios en Hollywood mientras arroja luz sobre situaciones problemáticas en compañías como Lucasfilm y programas como Saturday Night Live, Los Goldberg, Sleepy Hollow, Curb Your Enthusiasm y más", apunta también a la sala de guionistas de la emblemática serie de ABC y acusa a sus showrunners, Damon Lindelof y Carlton Cuse, de fomentar un ambiente tóxico y de racismo, entre otras.
Vanity Fair ha publicado un extracto de dicho libro, titulado Burn It Down, Power, Complicity and A Call For Change in Hollywood, que se encuentra en pre-venta y será publicado el 6 de junio. En él, Ryan entrevista a varios de los miembros del equipo de Perdidos, que destapan el supuesto infierno que vivieron entre bambalinas.
Diferentes guionistas y actores de la serie, que estuvo en emisión durante 6 temporadas entre 2004 y 2010, relatan un ambiente de trabajo tóxico. Entre ellos, miembr de la writers' room como Monica Owusu-Breen o Javier Grillo-Marxuach, y el actor Harold Perrineau, quien dio vida al personaje de Michael Dawson durante las dos primeras temporadas. Lindelof admite en el mismo libro que "fracasó" en cuanto a brindar "seguridad y comodidad" en la sala de guionistas.
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Owusu-Breen relata un entorno plagado de intimidación y comentarios inapropiados sobre la raza. "Todo lo que quería hacer era escribir algunos episodios geniales de una serie genial. Eso era imposible con ese personal". "No había manera de manejar esa situación. En parte porque realmente no les gustaban sus personajes racializados. Cuando tienes que ir a casa y llorar durante una hora antes de poder ver a tus hijos porque tienes que eliminar todo el estrés que has estado reteniendo, no vas a escribir nada bueno después".
La escritora Maureen Ryan se puso en contacto con Damon Lindelof a la luz de estas acusaciones de intimidación y racismo. "Mi nivel de inexperiencia como gerente y jefe, mi papel como alguien que se suponía que debía modelar un clima de peligro creativo y toma de riesgos, pero que brindaba seguridad y comodidad dentro del proceso creativo: fracasé en ese esfuerzo", declaró el showrunner.
El actor Harold Perrineau le dijo a Ryan que prescindieron de su personaje tras la temporada 2 después de que le expresara su preocupación por el arco narrativo de su personaje a Cuse. Perrineau decidió trasladarles su malestar por cómo a Michael parecía no importarle lo que ocurría con su hijo Walt y el hecho de que había sido secuestrado por Los Otros. "No puedo ser otra persona a la que no le importen los niños negros, incluso en el contexto de la ficción, ¿no?", declaró Perrineau. "Esto solo promueve la narrativa de que a nadie le importan los niños negros, ni siquiera a los padres negros".
Después de señalar sus preocupaciones, y solo unas semanas antes de grabar el final de la temporada 2, Perrineau dice que Cuse anunció que Michael no regresaría. "Estaba jodido por eso. Yo estaba como, 'Oh, me acaban de despedir, creo'". “"o estaba como, 'Espera un minuto, ¿qué está pasando?' [Cuse] dijo: 'Bueno, ya sabes, nos dijiste, si no tenemos nada bueno para ti, te quieres ir'. Solo estaba pidiendo el mismo peso".
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El actor reconoce en el libro que le fue difícil sacar el tema con Lindelof y Cuse. "Eso era lo que siempre era complicado. Cada vez que mencionas la raza, a todo el mundo le arde el pelo y dice: '¡No soy racista!'". "Es como en Nop. Porque diga que soy negro no significa que te esté llamando racista. Te hablo desde mi perspectiva. Estoy siendo muy claro en que no estoy tratando de trasladarte mi trauma, pero estoy tratando de hablarte sobre lo que siento. Entonces, ¿podemos hacerlo? ¿Podemos tener esa conversación?".
Según fuentes de Maureen Ryan, cuando ocurrió la salida de Harold Perrineau de la serie, Lindelof les dijo que el actor el actor lo había llamado racista por lo que había decidido despedirlo.
Cuando se le preguntó sobre el incidente que involucró a Perrineau, Lindelof declaró que no recordaba haber dicho "nunca" esas palabras sobre el actor. "¿Qué puedo decir? Aparte de eso, me rompe el corazón que esa haya sido la experiencia de Harold". "Y solo cederé que los hechos que estás describiendo ocurrieron hace 17 años, y no sé por qué alguien inventaría eso sobre mí".
"Quedó bastante claro que yo era el tipo negro. Daniel [Dae Kim] era el chico asiático. Y luego estaba Jack, Kate y Sawyer", declara Perrineau en el libro sobre cómo sus coprotagonistas blancos obtuvieron los papeles y tramas principales.
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Perrineau cuenta cómo señaló sus preocupaciones a un productor de Perdidos sobre la prioridad de los actores blancos sobre los miembros racializados de la serie, diciéndole que "no tengo que ser el primero, no tengo que tener la mayor cantidad de episodios, pero me gustaría formar parte. Pero parece que ahora es una historia sobre Jack, Kate y Sawyer". Según el actor que dio vida a Michael Dawson, el productor le contestó que "así es como el público sigue las historias" y que Locke, Jack, Kate y Sawyer eran "identificables".
Un guionista relata como a la sala de guion le dijeron repetidas veces que los personajes blancos como Locke (Terry O'Quinn), Jack (Matthew Fox), Kate (Evangeline Lilly) y Sawyer (Josh Holloway) eran los "héroes", y que "a nadie le importan estos otros personajes. Solo dales algunas escenas en otra playa".
La guionista Owusu-Breen también recuerda cómo a ella y a su compañero de la sala de guion se les encargó matar al Sr. Eko, interpretado por Adewale Akinnuoye-Agbaje. El actor quería dejar la serie y finalmente fue asesinado por el humo negro en la temporada 3, aunque supuestamente Carlton Cuse expresó que le deseaba un final diferente.
"Carlton dijo algo como: 'Quiero colgarlo del árbol más alto. Dios, si tan solo pudiéramos cortarle la polla y metérsela por la garganta'", recordó Owusu-Breen. "En ese momento dije: 'Quizás quieras moderar tu imaginación sobre el linchamiento para no ofender'. Y yo estaba muy claramente enfadada".
A la luz de estas acusaciones, Cuse respondió a Ryan que: "Nunca, nunca dije eso, y este intercambio nunca sucedió. Agregar más a esta mentira y sugerir que alguien fue despedido como resultado de una declaración que nunca hice es completamente falso", y agregó que la implicación es "completamente indignante".
El guionista Javier Grillo-Marxuach le dijo a Ryan que renunció después de la temporada 2 debido al ambiente de trabajo tóxico de la serie, describiendo la sala de guionistas como "un ecosistema depredador con su propia megafauna carnívora".
Varios guionistas de Perdidos le dijeron a Ryan que Cuse y Lindelof "toleraron o incluso alentaron la atmósfera general" detrás de la serie, que supuestamente incluía frecuentes comentarios racistas y tóxicos.