Ser el líder y presentador del programa más visto de la televisión ha dejado casi sin fuerzas a Pablo Motos, pero el presentador de 'El Hormiguero' está recuperando las energías para afrontar la temporada 19 del espacio de Antena 3 con unas merecidas vacaciones.
Desde el pasado 2 de julio, el valenciano y todo su equipo están disfrutando de unos meses libres antes de comenzar una nueva temporada, que se avecina como una de las más reñidas desde que lleva en emisión desde 2006, ya que tendrá enfrente, en el mismo horario de emisión, el access prime time, a su amigo y antiguo colaborador, Carlos Latre, que en Telecinco estrenará 'Babylon Show'; a David Broncano y su irreverente humor en un formato con el nombre todavía por determinar; al Gran Wyoming y su público fiel de 'El Intermedio'; y la alternativa a todos ellos con una oferta totalmente diferente, 'First Dates', donde Carlos Sobera seguirá ayudando a los daters que acuden al restaurante de Cuatro a encontrar el amor.
Mientras llega ese mes de septiembre tan movido, Motos se ha relajado disfrutando de algunos de los deportes que más le gusta practicar en verano, wakerboard, o su alternativa, el wakesurf. El valenciano se trasladó hasta el pantano de San Juan, situado en los términos municipales de San Martín de Valdeiglesias, El Tiemblo, Cebreros y Pelayos de la Presa, en el extremo suroccidental de la Comunidad de Madrid y suroriental de Ávila, para practicarlo en sus aguas, ya que este embalse tiene hasta 14 kilómetros de playas con embarcaderos para las actividades acuáticas.
Motos no duda en mostrar en redes sociales como practica wakeboard, una mezcla de esquí acuático y snowboard. Esta semana, el valenciano quiso compartir con sus seguidores de Instagram un vídeo donde se le podía ver deslizándose sobre el agua encima de una tabla mientras iba agarrado a una cuerda de la que tiraba una lancha.
Pero no se detuvo ahí. Cuando cogió un poco de confianza, no dudó en ponerse a realizar maniobras y saltos demostrando la soltura que había logrado en pocos días. También se animó con otra modalidad acuática, el wakesurf, que para practicarla hace falta un barco específico que genere olas para poder surcarlas con la tabla.
El presentador colgó un vídeo donde se le podía ver surfeando tras la estela de una embarcación, pero en un momento de las imágenes, el presentador caía al agua al perder el equilibrio, aunque él mismo lo comentaba en su post: "Flotando en el agua con final inesperado…"
"El wakeboard es un deporte acuático que combina varios deportes en el cual te deslizas sobre el agua encima de una tabla siendo arrastrado por una cuerda (palonier). Se basa en el equilibrio y en conseguir la distribución correcta del peso sobre la tabla", le explica a EL ESPAÑOL Antonio José Gutiérrez 'Guthy', instructor de Xtreme Gene Watersports Spain, una de las escuelas más prestigiosas de este deporte en España que se encuentra en el embalse de la Breña (Almodóvar del Río, Córdoba).
El equipo necesario es un cabo especial que une el barco con el deportista y que debe tener cierta resistencia, ya que será la que tire de la persona y le permita desplazarse sobre la estela del barco. También hace falta un chaleco salvavidas por seguridad (como el que lleva Motos y que se puede ver en el vídeo), pero tiene que tener unas características concretas, debe de ser ligero y cómodo, que no obstruya los movimientos para hacer piruetas y saltos.
Por último, una tabla especial de espuma y resina que va recubierta de una capa de fibra de vidrio. Debe tener suficiente calidad para aguantar la presión ejercida por el agua y el cuerpo de la persona. Además, pueden llevar pequeñas aletas en diferentes configuraciones para lograr determinadas acrobacias.
Pero no solo consiste en una embarcación, un chaleco, una tabla y una cuerda, ya que el wakeboard tiene dos versiones, la tradicional, con barco o lancha de arrastre y otra variante con un sistema de torres, poleas, cables y un motor. "En esta segunda modalidad no hay olas y estas se sustituyen por módulos en los que puedes hacer toda la serie de trucos, saltos y acrobacias que seas capaz", explica Guthy.
Además, es un deporte que aporta grandes beneficios a quienes lo practican como mejorar el tono muscular por la fuerza que se necesita para mantener el equilibrio en la tabla, ya que al hacer ese esfuerzo se tiene un gasto calórico importante. También potencia los reflejos y la concentración al estar pendiente de coger las olas provocadas por el barco.
"Si intentas hacer saltos, tu coordinación motora y la flexibilidad aumentarán. También es fundamental que, al ser una actividad altamente física, te ayuda a liberar la tensión y el estrés generando gran cantidad de endorfinas. Por último, al practicarlo en un entorno de naturaleza, te produce sensación de bienestar y libertad", comenta el experto.
"Se puede practicar en el mar, pero lo ideal es hacerlo en aguas cerradas y planas como las de un embalse o pantano. El viento es el peor enemigo de este deporte; si hay demasiado, es impracticable", añade Guthy. Por eso Motos elige el pantano de San Juan, y no Jávea, para practicarlo.
Eso sí, como en todos los deportes, hay que tener mucho cuidado en el wakeboard con las lesiones que pueden producirse practicándolo, ya que según los estudios realizados por diversas revistas médicas, el porcentaje más elevado de lesiones en los deportes acuáticos ocurren en las extremidades inferiores. Pueden ir desde contusiones a heridas, cortes, contracturas, latigazos cervicales, luxaciones, esguinces y problemas de oídos, entre otros.
Motos publicó en su vídeo una caída sin aparentes lesiones, que no tendrá que sumar a las que ya tiene en su cuerpo como rotura de bíceps, de tríceps, dos sóleos, la nariz, dos operaciones de menisco, una de hombro, una de orzuelo, seis costillas rotas, una lesión en el talón de Aquiles, dos covid...
Otros años se ha podido ver a Motos, siempre a través de sus redes sociales, en algunos vídeos practicando submarinismo entre bancos de barracudas en la localidad valenciana de Jávea y señalando "como estaba hoy el mar de vida", o navegando mientras le acompaña un grupo de delfines.
También ha usado el medio acuático para practicar deporte de fuerza, ya que en uno de los vídeos se le podía ver caminando por una piscina bajo el agua con unas pesas en las manos, haciéndose un largo sin respirar e intentando hacer unas flexiones antes de emerger.
Jávea, su válvula de escape
Ya en el mes de agosto, el destino preferido del valenciano es Jávea, un municipio de la Comunidad Valenciana situado en la costa norte de la provincia de Alicante, en la comarca de la Marina Alta.
El presentador tiene allí una casa cerca del cabo de la Nao, en una urbanización mecida por la brisa del mar y con unas vistas excepcionales. Sus villas se construyeron en los años 80, se han ido modernizando con el paso del tiempo, como la del presentador.
La publicidad de una agencia inmobiliaria de la zona afirma que "las parcelas empiezan normalmente a partir de los 800 metros cuadrados, con casas desde los 100 metros con dos dormitorios, hasta impresionantes villas de lujo situadas en primera línea de fascinantes acantilados a ras del mar Mediterráneo. Hay que tener en cuenta que este tipo de vivienda en Jávea es muy difícil de encontrar".
Allí Motos se ha reunido con un grupo de amistades de la infancia: "Como todos los años me reúno con mis amigos de toda la vida. Hemos vivido juntos desde la adolescencia hasta las canas", afirma el presentador de El Hormiguero.
Además, Motos es habitual de los locales de la zona, donde suele salir a comer o cenar, mostrando en redes sus menús o cuando coincide, entre otros, con Arturo Valls, como le pasó hace unos años, donde comió en el restaurante El Mirador junto al presentador Marron, Juan Ibáñez y Damián Molla: "Hemos venido a comer un arroz al horno y nos hemos encontrado a Arturo Valls. Si está él, el restaurante es bueno", afirmó el valenciano.
"Qué bueno haberos tenido en nuestro local celebrando el comienzo de la nueva temporada y la mayoría de edad del programa. ¡Qué ganas de volver a veros!", le contestaron desde la cuenta oficial del local donde acudieron.
Y es que la casa de Motos en Jávea es el centro de reunión del presentador y sus colaboradores en los últimos días de agosto previos al comienzo de la nueva temporada en septiembre, donde hablan de los temas que abordarán, secciones e invitados que recibirán durante los siguientes meses.
La nueva temporada
Todo ello con la vista puesta en que será una de las temporadas más disputadas de los últimos años con todos los rivales que tendrán en el resto de cadenas, aunque Motos y su equipo no temen a nada, ya que el año pasado ya consiguieron que Jorge Javier Vázquez solo aguantara diez programas con sus Cuentos chinos en Telecinco; que la apuesta de La 1 por la ficción con 4 estrellas no saliera como en el canal público pensaban y por eso han fichado, a golpe de talonario, a David Broncano; y que ni el Gran Wyoming o Carlos Sobera les hicieran sombra con sus formatos. Sin olvidarnos de Cifras y letras en La 2, que con su medio millón de fieles no le 'roba' espectadores a Motos, pero sí al resto de ofertas del acces prime time.