La causa para beatificar al arquitecto Antoni Gaudí entra en su recta final, una vez que el Arzobispado de Barcelona tomase en diciembre las riendas al configurar una entidad canónica como interlocutora ante la Santa Sede para culminar el proceso que llevará al arquitecto catalán a los altares.
Para encarar ese proceso final, el cardenal y arzobispo de Barcelona, Juan José Omella constituyó la Asociación Canónica que toma el relevo de la asociación de carácter civil probeatificación Antoni Gaudí, que hasta ahora ha llevado a cabo la tarea de promover la beatificación de Gaudí... desde 1992.
Son 32 años de un trabajo dirigido por otro arquitecto, José Manuel Almuzara, fundador y presidente de la Asociación probeatificación de Antoni Gaudí. Compuesta por distintos profesionales, en tres décadas ha estado promoviendo la causa con innumerables acciones. Desde estampitas a charlas, pasando por exposiciones para mostrar la devoción personal de Antonio Gaudí.
Ha sido en su tramo final cuando el Arzobispado ha tomado las riendas de la iniciativa. Ya está presentada la positio, o argumentario fundamental sobre la causa de beatificación de Gaudí ante el Dicasterio de las Causas de los Santos. Este dicasterio trata, según el procedimiento prescrito, todo lo relativo a las causas de beatificación y canonización. El dicasterio "da normas especiales y asiste con consejos e indicaciones a los obispos diocesanos, a los que compete la instrucción de la causa", según detalla la Archidiócesis.
Todo ello es fruto del trabajo dirigido por José Manuel Almuzara. Nacido en Nador (Marruecos) en 1952, se trasladó muy joven a Barcelona y estudió Arquitectura en la Escuela Técnica Superior de la ciudad condal. Se licenció en 1977. Fue en esos años cuando trabajó con dos arquitectos, Lluis Bonet e Isidre Puig, que a su vez habían sido discípulos de Gaudí, encargados del proyecto y dirección de las obras del Templo expiatorio de la Sagrada Familia de Barcelona.
Desde junio de 1992, y como presidente de la asociación que ha promovido la beatificación de Antoni Gaudí, se ha dedicado a proyectar públicamente las vertientes espirituales y artísticas del artífice de la Sagrada Familia, a través de conferencias, exposiciones y publicaciones. La asociación civil también se ha encargado de recoger testimonios de favores recibidos por su intercesión.
Almuzara es, además, Gaudinólogo. Es un reconocido experto internacional en la arquitectura del catalán, y autor de varios libros en torno a su figura. A lo largo de estos años ha participado en conferencias, comités científicos, mesas redondas, tertulias, en colegios profesionales, ateneos, universidades, colegios, parroquias o centros culturales, recorriendo para ello la geografía española y otros países iberoamericanos y europeos.
"Un gran místico"
En una entrevista concedida a Religión Digital el pasado mes de marzo, Almuzara detalló que "en 1992 no lo teníamos todo tanto de cara como en la actualidad: de hecho, entonces se pidió a la Iglesia de Barcelona y la Junta Constructora de la Sagrada Familia si querían hacerse cargo del proceso, pero se nos respondió que no era el momento. Las personas cambiamos de opinión, por suerte, y ahora todo es distinto".
En su periplo, también se ha reunido en varias ocasiones con el papa Francisco, "que siempre me ha mostrado interés por Gaudí. Una vez me habló de él como un 'gran místico'".
Si bien José Manuel Almuzara entró a formar parte, como vocal, en la Asociación Canónica de reciente creación, ha dimitido alegando motivos personales. Algunas voces críticas, como ha contado EL ESPAÑOL y Crónica Global, han advertido que tras esa dimisión podrían encontrarse ciertas desavenencias con el cardenal Juan José Omella.
"Hasta ahora, este era un proceso civil. Pero la Iglesia ha querido entrometerse en la foto porque detecta que la canonización llega a su fin. Y eso no ha gustado", explicaron esas fuentes, cercanas al conflicto, a Crónica Global.
La asociación alerta de la "dimisión, cuando no destitución", de Juan Manuel Almuzara. En conversación con Crónica Global, Almuzara definió a la nueva entidad, creada por el Arzobispado de Barcelona, como "canónica". Según él, "se le ha querido dar la forma canónica al proceso de santificación" de Gaudí, y ello "ha provocado que ni yo ni el resto de miembros de la asociación civil estén presentes en la misma". De hecho, fueron invitados varios miembros de la asociacion cívica y Almuzara aceptó el cargo de vocal, para dimitir tan sólo 18 días más tarde.
Para zanjar cualquier polémica, advierte Almuzara que el Arzobispado de Barcelona, "no ha abierto ningún conflicto, ni en la Basílica de la Sagrada Familia, ni el cardenal Omella ha provocado mi dimisión como presidente de la asociación probeatificación de Antoni Gaudí, como asociación civil. Al contrario, siempre quiso que estuviera colaborando en la Asociación Canónica. Y así pienso hacerlo, aunque no tenga ningún cargo ni pertenezca a dicha Asociación".
El arquitecto asevera que se encuentra "feliz" por el momento en el que se encuentra la causa de la beatificación, y confía en que "pronto la Comisión de teólogos apruebe la positio y, después del veredicto favorable de los cardenales asignado, el papa Francisco firme el decreto de virtudes y Gaudí sea declarado venerable".