Yusef (Ceuta, 2003), al que muchos conocen en su círculo cercano como 'El Pastilla', apenas llevaba dos semanas en la prisión de Alcalá Meco (Madrid). Le habían trasladado desde Algeciras por "incompatibilidad" de convivencia en Botafuegos con presos de bandas narcotraficantes rivales. En la víspera de Nochebuena, cuatro familiares fueron a verle a la cárcel. Primero acudieron al locutorio, y luego, más íntimo, uno de ellos tendría con él un vis a vis. Fue ahí cuando se le presentó la oportunidad de protagonizar una de las escapadas penitenciarias más insólitas que se recuerdan.
Cuando finalizó la comunicación con los suyos, tal y como revelan fuentes penitenciarias consultadas por EL ESPAÑOL, el ceutí se infiltró junto al resto de visitantes de la prisión. Tenía como objetivo escaparse. Un total de 11 familiares de distintos presos fueron llevados de vuelta hasta el control de acceso desde el interior del módulo.
En una primera puerta comenzaron a nombrarlos uno a uno para entregarles los DNI que habían depositado a su llegada. Mientras el funcionario daba las tarjetas a sus respectivos dueños, Yusef aprovechó para colarse por detrás del trabajador por una puerta de 80 centímetros. Los familiares guardaron la compostura, ni se inmutaron al ver la escena y continuaron su camino como si nada hubiera ocurrido.
Siete metros más adelante, el sicario ceutí tenía una nueva barrera que sortear: una segunda puerta que no puede estar abierta a la par que la anterior. Sin embargo, Yusef tenía esa tarde la suerte de cara y se encontró la barrera sin cerrar. Estaba cerca de conseguirlo, pero aún tenía que pasar otro control.
Alcalá Meco es una prisión de las antiguas. La puerta de entrada se sitúa a unos 300 metros de la principal. Todo ese recorrido lo hace Yusef, que llega hasta el puesto de la Guardia Civil en el acceso al recinto. En ese momento se dirige hacia la barrera para salir de la cárcel.
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Los agentes le paran y le dicen que no puede salir por ahí. "Le indican la salida reglamentaria", por el departamento de comunicaciones, que está justo al lado. "La Guardia Civil piensa que es un familiar", dicen las fuentes penitenciarias consultadas por EL ESPAÑOL.
Ahora, la Guardia Civil trabaja por encontrarle y también se ha abierto una investigación para esclarecer lo ocurrido. Por el momento, tal y como ha podido confirmar EL ESPAÑOL, en las grabaciones de las cámaras de seguridad, ya revisadas por Prisiones, se aprecia claramente cómo Yusef aprovecha el descuido para entremezclarse con el resto de visitantes, eludiendo al funcionario que devolvía los carnés en un despiste del mismo.
En esas imágenes se le ve abandonando la cárcel con total tranquilidad. Las fuentes consultadas, eso sí, consideran el fallo de seguridad como "muy grave".
Así, el interno sale a la calle con varios de los familiares que han realizado la visita. Ahí no están los suyos. Quienes habían ido a visitar a Yusef aguardan pacientemente en comunicaciones exteriores para que uno de ellos pueda acceder al vis a vis que le habían autorizado con el joven de 20 años, en prisión como presunto autor de dos asesinatos. En realidad, saben que con suerte el encuentro no se producirá.
Las mismas fuentes señalan que desde el Centro de Inserción Social (CIS), a 200 metros de la salida de la prisión, ven al sicario ceutí salir corriendo. Nadie sabe qué ocurre. "Es increíble cómo sucedió. No solo fue un error, fueron varios y se dieron todos de forma consecutiva", señalan fuentes penitenciarias a este periódico.
Señal que indica el camino a la prisión de Alcalá-Meco.
Las mismas fuentes inciden en que "la política de personal" llevada a cabo por el director de Alcalá Meco no está "bien gestionada": "La gran mayoría de funcionarios estamos cada día en un puesto distinto". Es la explicación que ofrecen para tratar de entender lo que pasó.
En el módulo de respeto
'El Pastilla' se encontraba en la cárcel en régimen de FIES 5, uno de los más restrictivos, reservado para reclusos vinculados a la delincuencia común de tipo internacional, a autores de delitos muy graves que hayan generado una importante alarma social. Fuentes penitenciarias aseguran a este periódico que el joven ceutí se encontraba en el módulo de respeto, a pesar de ser un interno peligroso que llevaba poco tiempo en esa prisión. Desde el pasado sábado, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado buscan al fugitivo.
Yousef M. fue detenido en mayo de este año como presunto autor del asesinato de un joven en Algeciras en octubre de 2022. El sicario acabó con la vida de un hombre de 26 años, trabajador del Puerto de Algeciras, con pareja y dos hijos, tras confundirlo con otro hombre de un clan rival en la barriada de El Saladillo.
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En concreto, El Pastilla trabajaba para Nayim K. A., conocido como 'El Tayena', que le habría encargado matar a un miembro de los 'Piolines'. Yusef, encapuchado, disparó cuatro veces a bocajarro en el pecho a J. F. A., ajeno completamente a cualquier actividad delictiva.
Sin embargo, el ceutí no sería detenido hasta meses más tarde. La Guardia Civil le localizó en abril de este año en el Puerto de Algeciras tratando de huir a Ceuta.
Yusef reconoció que había disparado a otro hombre. En este caso, se trataba de su jefe, 'El Tayena'. El sicario le había disparado en el vientre cerca de su vivienda habitual, en Los Cortijillos.
'El Tayena' no murió en el acto. Los servicios de emergencias lograron reanimarle y llevarle al Hospital de La Línea. No salió de allí con vida.
La Unidad Drogas y Crimen Organizado (Udyco) y la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (Udev) de la Policía Nacional de Algeciras realizaron un registro domiciliario y concluyeron la investigación del primer asesinato ocho meses después. El fugitivo estaba en prisión preventiva a la espera de la celebración de los juicios.