La historia de David Pollán es la de un joven con afán de superación y ambición de convertirse en un hombre de éxito. En sus horas libres es ciclista en las categorías de élite sub23 y ha competido junto a su equipo, Louriña Team XR, en la Copa España. El resto del tiempo, estudia a destajo para convertirse en uno de los alumnos más brillantes de su promoción. De hecho, Pollán, natural de Castro de Rei, en Lugo, Galicia, ha sido el alumno más aventajado de su FP; un curso que roza el 100% de empleabilidad y en el que ha logrado tener el mejor expediente académico de su promoción.
El sueño de Pollán, confiesa a EL ESPAÑOL, es ser ciclista profesional. "Mi objetivo, al menos, es intentarlo", explica al otro lado del teléfono. "Actualmente estoy en élite sub23, categoría amateur, que es la antesala de la élite profesional. Son cuatro años y voy por el segundo".
Aunque aún no ha conquistado ningún oro, ha quedado en muy buenas posiciones junto a su equipo. "Hasta he hecho un top 20. De todos modos, es una pasión que me llegó bastante tarde. Empecé por mi padre cuando tenía 13 años. De eso que vas a los montes el fin de semana y le coges el gusto".
Resulta especialmente llamativo que la FP que decidió estudiar David Pollán no tuviera absolutamente nada que ver con su carrera deportiva. Se trata de un curso impartido por el Centro de Formación Profesional Las Mereces, en Lugo, un centro que al joven estudiante, de 20 años, le ha servido de trampolín profesional.
El ciclo superior que estudió es el de Eficiencia Energética y Solar Térmica, unos estudios que están enfocados al conocimiento de las energías renovables y la mejora de sus instalaciones, y cuyo objetivo es que sus alumnos sepan diseñar, dibujar, calcular, soldar y montar diferentes partes de aparatos renovables y realizar su control y mantenimiento. "Tenía un amigo que lo hizo el año anterior. Me comentó que la formación estaba muy bien, así que decidí probar".
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Tras un par de años de estudio, Pollán sacó la mejor nota de la FP: un 9,5. "No recuerdo cuál fue el segundo mejor, pero era un ocho y algo, no llegaba al nueve", asegura, orgulloso de su logro. "Durante estos años hemos aprendido a montar placas solares, energías eólicas, calefacciones, suelos radiantes, tanto en su instalación como su mantenimiento. El curso también nos vale para certificar energías renovables y algunos edificios".
Lo bueno de este ciclo superior, asegura el prometedor ciclista, es que no se requiere unos conocimientos previos para poder ingresar en el curso. "Hay bastantes clases prácticas que te acaban dando el conocimiento para trabajar de esto. Es verdad que hay que echarle tiempo, y las clases teóricas son bastante complicadas, porque es una materia muy densa, pero luego, en la práctica, todo se ve muy bien". Esa FP, además, está "en torno al 100% de empleabilidad, de las más altas, porque es un sector en el que falta gente y sobra trabajo".
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Para David Pollán hacer esta FP es una forma de garantizarse un futuro profesional, aunque su sueño no es dedicarse a la eficiencia energética, sino al ciclismo. De ahí que las buenas notas de esta formación le sirvan para continuar con sus estudios en la Universidad pública de La Coruña (UDC) en la carrera de Fisioterapia.
"Mis aspiraciones eran lograr la mayor nota posible para acceder a la universidad con las mejores calificaciones. Necesitaba un 11,5 para estudiar Fisioterapia para poder dedicarme a la rehabilitación deportiva y a la terapia para prevenir lesiones. Al final tuve un 13,2, así que me sobraron varios puntos".