Daniel Ramírez Ramírez es conocido, respetado y querido por la población latina que reside en Murcia, por su pasado como capitán de la selección Sub20 de Colombia y como jugador del Once Caldas: uno de los clásicos de la liga colombiana porque atesora cuatro campeonatos ligueros y una Copa Libertadores que le ganó a Boca Juniors. La carrera de Dani como futbolista profesional decayó cuando se instaló en España y dio paso a su estreno en el negocio familiar: Fonda Milagros, la discoteca donde han muerto 13 personas, en un incendio que se ha convertido en una de las mayores tragedias del ocio nocturno de este país.
El horizonte legal que tiene por delante el futbolista y su familia será mucho más complicado que la final de cualquier competición: el Juzgado de Instrucción número 3 de Murcia ha abierto diligencias por 13 homicidios imprudentes. Francisco Adán, abogado de Fonda Milagros, prevé que Daniel será citado a declarar "dentro de unos diez días". El letrado asegura que su cliente "está hundido" por esta tragedia, a pesar del carácter que exhibía unas veces en el centro de la zaga y otras en la banda izquierda, defendiendo la elástica de Once Caldas y de Jaguares FC en Colombia, de Alebrijes de Oaxaca en México o de Universidad César Vallejo en Perú.
Cuando el defensa Dani Ramírez (Colombia, 1995) aterrizó en suelo español no logró jugar en equipos de primera: se movió en tercera división. Entre sus destinos -según varios portales especializados de fútbol- destaca el filial del UCAM, el Ciudad de Murcia o el Villa de Fortuna que en 2021 jugó la primera ronda de la Copa del Rey frente al Cádiz. Tales equipos ponen de manifiesto que la carrera profesional de este colombiano distaba mucho del año 2017, cuando Transfermarkt cifró en 250.000 euros su valor dentro del mercado del planeta fútbol.
En la incursión de este futbolista en el sector de la hostelería tiene mucho que ver su madre: Luz Milagros, conocida por sus allegados como 'Mila'. Esta mujer es famosa entre la comunidad colombiana afincada en Murcia, por su talento para cocinar platos típicos de su país. "La llaman 'Mila la de las comidas' porque preparaba papas cuando llegó a España y luego las vendía", tal y como recuerda un conocido de la familia Ramírez. "Ella siempre ha estado ligada a la gastronomía y a la hostelería, creo que incluso llegó a trabajar o a tener un local en el Barrio del Carmen".
La buena de 'Mila' hacía unas papas colombianas -rellenas de carne, guisantes, cebolla y tomate- para chuparse los dedos. "Vendía a domicilio toda la comida que preparaba", insiste este conocido desde el anonimato, a la vista de la catástrofe sucedida en la Discoteca Fonda Milagros que gestiona Daniel Ramírez Ramírez junto a su hermano: Juan Esteban. De hecho, este ciudadano de Colombia asegura que el nombre de la sala es un guiño a su querida madre: una Fonda significa cantina donde se venden comidas y Milagros por el nombre de la mujer que les dio la vida.
Un cliente de la Discoteca Fonda Milagros tras escapar del incendio.
"Les iban bien los negocios", resume este conocido de la familia. "Ellos son pijos como dicen ustedes en España". Así lo corrobora otro hostelero de profesión y amigo de los Ramírez, al asegurar que regentaron otro local de copas antes de montar la Fonda Milagros en la zona de ocio de Atalayas donde se ha producido la tragedia: "Ellos se pasaron a Atalayas porque se les quedó pequeña la otra sala porque tenían mucho público".
La clave para instalarse en uno de los puntos neurálgicos de la noche murciana fue el contrato de alquiler que cerraron con Teatre Sociedad Limitada: propietaria de tres naves con una licencia de actividad del Ayuntamiento de Murcia para discoteca con cocina. En esta mercantil figura como administrador único: Juan Inglés Rojo, un empresario con muchas luces y sombras en su trayectoria, donde ha desempeñado cargos en sociedades de comercio de plata y oro, intermediación inmobiliaria, consultoría empresarial, compraventa de chatarra...
El verano de 2019 abrió sus puertas Fonda Milagros, mientras el hijo de 'Mila' simultaneaba su nueva labor empresarial con su carrera en el mundo del balompié. "Daniel fue futbolista profesional en el Once Caldas: un equipo que siempre ha estado en primera división en Colombia", según resalta este hostelero y amigo de la familia Ramírez. Pero a este futbolista veinteañero, nacido en Manizales, una ciudad marcada por sus cultivos de café y el volcán Nevado del Ruíz, le iba mejor con los negocios que en los terrenos de juego: "En Murcia estuvo en tercera división".
Algunos achacan el éxito de Dani en el mundo de la noche a la visión comercial de 'Mila': "Ella vendía papas a domicilio". Esta madre coraje empezó desde cero cuando aterrizó en Murcia, a base de currarse platos típicos colombianos, y supo sobreponerse a tragedias personales como la muerte de su hija: Luisa. Precisamente, Juan Esteban también entró en la gestión de la discoteca por herencia de su hermana.
"Era una treintañera muy guapa", tal y como coinciden en subrayar estos dos compatriotas que conocen a los Ramírez. 'Mila' se apoyó en sus dos hijos, Daniel y Juan Esteban, para superar semejante pérdida. Y ahora, la familia vuelve a hacer piña tras lo sucedido este domingo, cuando un incendio devoró la Fonda Milagros: la discoteca latina que tantos beneficios le generó al clan familiar, como para invertir en un restaurante que también regentan porque en los papeles puede aparecer un solo nombre, pero en la gestión siempre participan todos como ocurría con la disco.
Los bomberos refrescando las fachadas de las discotecas Golden (1i) Teatre (c) y Fonda Milagros (1d)..
El local que habían alquilado los Ramírez -para seguir ganando peso en el sector del ocio y de la restauración- era el de este hostelero colombiano que atiende a EL ESPAÑOL: un establecimiento que gestionó en Murcia con éxito, durante ocho años, gracias a una carta a base de recetas antioqueñas, como la bandeja paisa, salchipapas, arepas…
"Mila y sus hijos, Daniel y Juan Esteban, eran clientes habituales de mi restaurante, les gustaba, y me dijeron que si alguna vez lo dejaba que les avisara", según resume el anterior encargado del citado local de comida y que en la actualidad administra la familia Ramírez. Todo ello, después de que este profesional de los fogones se instalase en Alicante para abrir un nuevo negocio: "Se lo cedí a ellos porque la comida de mi país requiere de mucha elaboración y tenía ganas de tener un bar más pequeño".
A Dani Ramírez, a su hermano, Juan Esteban y a su madre, Mila, le iban viento en popa la discoteca y el restaurante, de modo que parece que había aparcado el fútbol porque en diversos portales deportivos figura que en la presente temporada estaba "sin equipo". A las seis de la madrugada de este domingo, la carrera empresarial de este futbolista se fue al garete con la misma rapidez que se extendieron las llamas del incendió que arrasó las discotecas Fonda Milagros, Teatre y Golden.
Una de las claves de la investigación judicial de esta tragedia, consiste en concretar la causa y el foco del incendio. De momento, los bomberos barajan que el origen de las llamas fue un cortocircuito en un foco de una pista de baile y consideran que todo se inició supuestamente en Fonda Milagros porque esta discoteca tenía la mayor carga de fuego. Además, en su interior se localizaron los 13 cadáveres. Uno de ellos podría ser el de Olga Lucrecia: la mujer de Ferney Lozano, un afamado locutor de la emisora SuperMix y que a veces trabajaba animando eventos de esta sala latina.
El abogado de Fonda Milagros, Francisco Adán, sostiene que el foco del incendio fue Teatre y las llamas se extendieron a la sala de los Ramírez con un saldo mortal entre sus clientes. En juego hay mucho, cada homicidio imprudente esta castigado con penas de cárcel de 1 a 4 años y multiplicado por trece: eso arroja un máximo de 52 años a la sombra. De forma que tanto los hermanos Daniel y Juan Esteban, de Fonda Milagros, como Juan Inglés Rojo, administrador de Teatre Sociedad Limitada, serán llamados a declarar al Juzgado de Instrucción número 3 de Murcia.
Los clientes de las discotecas Fonda Milagros y Teatre, este domingo, grabando el incendio tras ser desalojados.
Otra de las claves de la causa es aclarar la situación legal de la actividad de ambas discotecas: Teatre y Fonda Milagros. Todo ello, después de que el Ayuntamiento de Murcia haya anunciado que se personará como acusación particular contra Teatre Sociedad Limitada: por dividir sin permiso una de sus tres naves, para alquilársela a esta familia colombiana para habilitar una disco latina, a pesar de que en enero de 2022 el Consistorio emitió una orden de cierre contra la mencionada sociedad.
El letrado Francisco Adán asegura que Fonda Milagros tenía licencia de actividad, pero se quemó en el incendio. También afirma que el Consistorio sabía que esta sala de ambiente latino abría cada fin de semana porque hay resoluciones de las consejerías de Presidencia y de Sanidad, "notificadas a Daniel Ramírez Ramírez", así como una multa de la Policía Local de Murcia por incumplir el horario de cierre. "Me parece surrealista que el Ayuntamiento diga que no existía la Fonda Milagros".
Adán rechaza cualquier opción de entrevistar al empresario y futbolista: "No se encuentra con fuerzas para hablar con nadie". Poco queda ahora mismo del ímpetu del defensa, Dani Ramírez, que en entrevistas en Latinoamérica advertía de que cuando saltaba a la cancha: "Siempre lo doy todo".