La profesión de Growth Hacker probablemente le sea desconocida a buena parte de los lectores, sobre todo si nunca se han dedicado profesionalmente al sector tecnológico. A Adrián Márquez, que actualmente ostenta el título y trabaja de ello, también le resultaba un concepto abstracto y lejano. Hasta que le cambió la vida por completo. En menos de un año logró duplicar su sueldo, mejorar las condiciones de trabajo y tener la posibilidad de trabajar 100% en remoto desde cualquier lugar de España.
Este sevillano de tan solo 28 años empezó estudiando el Grado de Publicidad en la Universidad de Sevilla hace una década. “Cuando terminé me di cuenta de que no te preparaba suficiente para ninguna carrera profesional en concreto. Por ese mismo motivo decidí volcarme en el márketing digital y empezar a especializarme”. Al poco tiempo de acabar un máster, empezó a trabajar en Petroprix, la red de gasolineras low cost. Allí estuvo tres años. “Aprendí muchísimo, pero a medida que pasaba el tiempo empecé a darme cuenta de que empecé a estancarme personal y profesionalmente. Fue entonces cuando decidí dar el salto definitivo”.
Adrián empezó a formarse él mismo en productos digitales y growth (crecimiento digital). Sus principales fuentes de aprendizaje eran todo tipo de revistas especializadas, portales digitales, podcasts y hasta newsletter del sector que le aportaban información clave. “Empecé a indagar cada vez más y descubrí Product Hackers, una escuela donde podía formarme en profundidad a nivel digital y que tenía muy buenas referencias a nivel español”. No dudó en inscribirse inmediatamente y empezar su formación académica en los estudios de Experimentación Digital para acabar conviertiéndose en un profesional del crecimiento digital. O lo que es lo mismo: en un Growth Hacker.
La formación, que se vehicula a través de un bootcamp (curso de aprendizaje intensivo), dura menos de 12 semanas y tiene un coste de aproximadamente 2.600 euros. Eso sí: todos los profesionales del sector hacen hincapié en que es necesario aplicar los conocimientos durante un tiempo antes de dar el salto definitivo al mundo laboral. “No sales del curso siendo un experto en la materia. Te dan todas las herramientas necesarias para que, una vez termines, empieces a aplicarlas e ir cogiendo experiencia”.
Según Javier Lipúzcoa, squad leader en Product Hackers, el proceso de formación debe constar de entre tres y seis meses aproximadamente. “Estas formaciones completan con conocimiento específico a perfiles de muchos sectores. Acostumbran a venir profesionales con mucha visión de negocio pero con poca experiencia técnica, que es lo que les brindamos”.
La primera empresa donde entró Adrián al terminar la formación fue en la agencia de la misma escuela donde estudió. Fue allí donde desarrolló todo lo aprendido en el bootcamp y empezó a darse cuenta de que le gustaba el trabajo. “A nivel de aprendizaje diario, flexibilidad laboral, posibilidades de formación gratuitas y proyección profesional no hay color”. Pero su suerte no acabó allí. A los pocos meses, recibió la llamada de Kampaoh, una empresa de campings preparados en plena naturaleza, en la que le ofrecían ser director de márketing. Aceptó. “Además de desplegar todo lo que he aprendido, ahora tengo un rol de mayor profesionalidad y estoy inmerso en una empresa que me apasiona desde hace tiempo”, explica.
Hasta 90.000 euros anuales
El sueldo medio, según cuentan desde Product Hackers, una de las escuelas españolas de referencia en formación digital, está en un rango de entre 60.000 y 90.000 euros brutos anuales. Además de que en muchos casos los profesionales tienen acceso a equity de la compañía, “que puede llegar a cientos de miles o millones en los casos de mayor éxito”, dicen desde la escuela.
“Cuando empiezas a formarte en Growth Hacking te das cuenta de que muchas de las conversaciones profesionales que habías escuchado hasta el momento no tienen ningún rigor científico. Lo que te permite este campo del conocimiento es analizar y cuantificar todo”. Márquez afirma que hasta ahora todo lo que le habían enseñado acerca del márketing era poco preciso, a base de prueba y error. “Con la formación de Experimentación Digital vas a lo concreto. Puedes implementar campañas basadas en datos, por lo que las probabilidades de éxito son muchísimo mayores”.
En resumidas cuentas, el Growth Hacker es aquel profesional capaz de recopilar y analizar todo tipo de datos para crear estrategias de crecimiento de negocio para la empresa. Al tener un conocimiento tan amplio, puede ejercer roles de marketing, crecimiento digital o analítica pura. “No me gusta referirme al perfil como Growth Hacker. Prefiero llamarles simplemente Growth, ya que la palabra Hacker viene asociada a la inmediatez y al bajo precio. Y eso no es así”, cuenta Lipúzcoa a EL ESPAÑOL. Se trata de un perfil, aclara, que todavía “no tiene el reconocimiento que merece”. “Eso sí, el sueldo medio está por encima de muchas otras profesiones. Un perfil junior puede empezar cobrando 40.000 al año sin problema”, concluye.
En el caso de Product Hackers, todos los alumnos que se han formado en esta disciplina han conseguido trabajo durante la formación o nada más terminarla. “La formación apareció hace apenas dos años. Todavía existe muchísima demanda por parte de las empresas y muy poca oferta de trabajadores”, apunta Javier Lipúzcoa. “No existe tasa de paro, en estos momentos. De hecho, en España, los puestos de trabajo se cubren con muchísima dificultad. Todavía queda mucho camino por recorrer”.