El paracaidismo está normalizado en la política española. No es algo nuevo ni recién inventado. Los casos son múltiples y se dan en la mayoría de partidos. La última 'paraca' conocida es Macarena Olona, de Vox, que tratará de tomar San Telmo en las próximas elecciones andaluzas del 19 de junio habiendo nacido en Alicante. A causa de ello se le ha atacado en múltiples ocasiones, pero en realidad nadie ha podido probar que la líder de ultraderecha no tenga raíces andalusíes.
Celosa siempre de su intimidad, Olona ha sembrado la duda sobre sus orígenes en alguna ocasión. "Yo no tengo que tirar de pedigrí andaluz, que lo tengo. Si finalmente soy designada candidata, lo que tengo que hacer es demostrar que tengo el corazón lleno de amor por España y por Andalucía. Y, de eso, voy sobrada", apuntaba en Vozpópuli.
Qué familia tiene Olona en Andalucía es complicado de descifrar. EL ESPAÑOL ha intentado saber qué une a la candidata del partido ultraderechista con la región sur de España. Sin embargo, ha sido complicado. Algunas veces las contestaciones han sido contradictorias, mientras que en otras se ha encontrado la callada por respuesta.
Personas que han trabajado con ella en el partido aseguran a este medio que Macarena Olona tiene familia en Granada. De ahí la relación estrecha que mantiene con la provincia nazarí o, en parte, que el partido decidiera ligarla a esta circunscripción andaluza y no a otra.
Fuentes del entorno cercano a la candidata, sin embargo, aseguran que sus padres son de Jaén y que tuvieron que marchar a Murcia por motivos laborales. Son dos nuevas vías de un rompecabezas nada claro en el que Jaén parece encajar, pero Murcia en ningún caso.
Es cierto que los antepasados de Olona estuvieron en Jaén. Al menos, su abuelo materno. Tal y como ya contó EL ESPAÑOL, Felipe Choclán era ceutí y llegó a la provincia de los olivos como secretario del Gobierno Civil del régimen. De allí se le trasladó a Alicante, donde acabó por abandonar la carrera política para dedicarse al negocio inmobiliario y a la escritura.
El celo de Olona a su intimidad hace que sea complicado aportar luz sobre su 'pedigrí' andaluz. Quizás porque nadie se lo ha preguntado; quizás porque al electorado no le interesa en realidad de dónde sea la candidata.
¿Otro secreto? Gavira
Santiago Abascal usaba el pasado miércoles nueve palabras para anunciar su estrategia final de cara a las elecciones andaluzas del 19 de junio. Además, dejaba en cuadro a la defensa contraria. "A Macarena se le está poniendo cara de presidenta", decía el líder de Vox.
El jueves, Vox insinuaba la candidatura con un vídeo de una mujer (presumiblemente Olona) montada a caballo. Por la tarde, hacían firme su candidatura: Macarena Olona sería la encargada de tomar San Telmo.
Sin embargo, hasta que Abascal no se pronunció el pasado miércoles, las dudas sobre la candidatura de Olona eran muchas. Tanto que ni en el entorno cercano al PP andaluz tenía claro quién podía ser la punta de lanza del partido en el 19-J.
Hace tiempo que sonaba el nombre de la abogada del estado, pero sobre el tablero nada estaba claro. El problema no ha sido nunca que los andaluces la vieran como una paracaidista, sino que era quemar una nave de un gran valor a nivel nacional.
El nombre de Manuel Gavira, portavoz en el Parlamento andaluz de Vox, sonaba con fuerza en los mentideros políticos. De hecho, el día de la convocatoria de elecciones, la formación de ultraderecha subía un vídeo del gaditano a sus redes sociales del Parlamento de Andalucía. Dejaba claro que la intención era la victoria.
Fuentes del partido han asegurado a EL ESPAÑOL en ese sentido que el nombre de Gavira ha estado sobre la mesa también para Vox. "Muchos creían que Olona era un baluarte en el Congreso y que podría ser una gran ministra de Justicia o de Interior. El problema es que Gavira no es muy conocido y, entre otros muchos factores, eso ha inclinado la balanza".
El pedigrí andaluz de Macarena
Hay un dicho que recorre Andalucía: "Eso es como tener un tío en Graná (Granada para los que no hablen andaluz), que ni tiene tío, ni tiene ná". El hermetismo que rodea a la familia de Olona propicia que muchos piensen eso, pero la duda sobre sus raíces sigue presente.
A pesar de todo, el hecho de ser una cunera o paracaidista —término con el que se conoce a quienes son presentados en circunscripciones a las que no pertenecen— es algo que no coge de nuevas a Olona y que tampoco parece acomplejarle.
La abogada del Estado es diputada por Granada en el Congreso desde los comicios generales de 2019. Por entonces, ya se le acusó de llegar a territorio andaluz sin conocer prácticamente nada de la región sur de España.
Lejos de amilanarse por ello, Olona ha llegado incluso a reclamarse andaluza en un mitin en Sevilla durante el día de Andalucía. "Soy libre, soy española, soy madre, soy hija, soy hermana y soy andaluza. Y en mi Andalucía, tradición española. Tradición española, valores occidentales", decía la representante en el Congreso de la provincia nazarí.
En las últimas semanas ha intensificado sus relaciones con el folclore andaluz. Y es que Olona presume de Andalucía en las redes sociales cada vez que puede. "Si vienes a Sevilla tienes que pecar en La Campana", escribía en su Twitter la alicantina.
Esto le ha traído alguna bronca en redes con la líder andalucista Teresa Rodríguez. "Macarena, nuestra cultura y nuestro folclore no son vuestro disfraz electoral", le dijo la lideresa gaditana a su homóloga alicantina en un vídeo publicado en redes antes de la convocatoria de elecciones.
"No seas paripé de Triana. Suenan tambores electorales en Andalucía y la extrema derecha está de montería a la caza del voto de los andaluces y las andaluzas, pero viniendo de fuera y sin tener ni puñetera idea del suelo que pisan. Claro, tienen serias dificultades para presentar un candidato de por aquí cuando el último portavoz está imputado por un caso muy grave de corrupción con subvenciones públicas", le expuso en relación a lo ocurrido con el juez Francisco Serrano.
Una de las broncas más conocidas entre Rodríguez y Olona fue la producida cuando la candidata de Vox se probó su traje de gitana para las distintas ferias andaluzas. Rodríguez le recriminó que se "disfrazara de flamenca para fingir ser lo que no es. Muy adecuado para los carnavales en los que estamos, Macarena".
Precisamente será ese traje el que paseará a partir del sábado por la Feria de Abril. Paracaidista o no, a partir de ahora tendrá varias oportunidades para manchar su traje de albero: primero será en Sevilla y luego llegará el momento de la Feria del Caballo en Jerez de la Frontera, quinta ciudad en población de Andalucía. A posteriori, antes de las elecciones, otras ferias y la Romería de El Rocío en Huelva, la provincia andaluza en la que los analistas predicen unos peores resultados a Vox.
Ser diputada en el Congreso no impide a Olona presentarse a los comicios andaluces, como aseguraron en el sur algunas voces. Eso sí, una vez pasen los comicios y conozca los resultados tendrá que renunciar a uno de los dos puestos, al nacional o al regional.
Aún es pronto para saber quién saldrá vencedor de dichas elecciones y, aunque todos los sondeos apuntan a Juan Manuel Moreno Bonilla, está por ver quién consigue formar Gobierno y de qué manera. Vox sale a ganar (un concepto muy amplio en política), pero Olona ya respondió al diario Granada Hoy que, en caso de tener que pactar, "exigiría la Consejería de Familia".
Andalucía tendrá la última palabra. La candidatura de Olona moviliza a la derecha, pero presumiblemente tendrá un efecto similar entre los votantes de izquierda. De ahí que algunos ya tengan miedo de lo imprevisible de los resultados.