Cristina Mariscal Copano, una madre negacionista que secuestró a sus dos hijos, de 12 y 14 años, para evitar que fuesen vacunados contra la Covid, saldrá en libertad con cargos y no podrá comunicarse con los menores tras comparecer ante el juez.
El abogado del padre de los menores, Javier Toucedo, ha explicado a Efe que la autoridad judicial ha decretado además una orden de alejamiento de 300 metros.
Mariscal Copano, de 46 años, se personó ayer ante los juzgados de Sevilla y una vez en dependencias judiciales se identificó y entregó a los niños, por lo que el juez ordenó que quedase detenida hasta que compareciera ante el titular del juzgado.
El padre, David Kau, denunció el pasado diciembre que desde hacía casi un mes no veía a sus hijos y culpaba a su exesposa y madre de los niños de habérselos llevado de la casa de su actual pareja en Jerez de la Frontera (Cádiz), entre otros motivos para que no fueran vacunados.
Primer caso de España
Este caso, supone el primero en España en el que un progenitor, presuntamente, sustrae a los menores para evitar la inoculación de las vacunas para frenar a la Covid-19. El padre de los menores, David, yaya se ha reunido con sus hijos que están en buen estado.
Diego y Hugo Kau, con su padre, David.
Pese a ello, esta historia comenzó cuando Cristina se llevó a los menores, en primera instancia, a Jerez de la Frontera (Cádiz), pero a partir de ahí se le perdió la pista. Su expareja, el padre de los pequeños, llevaba sin verlos desde el 4 de noviembre y la ha denunciado por sendos delitos de sustracción de menores y secuestro.
La búsqueda de Diego y Hugo Kau Mariscal, de 14 y 12 años respectivamente, comenzó tras el 16 de diciembre. En los grupos de Whatsapp y las redes sociales jerezanas se difundía la foto de los dos pequeños. En un primer momento, se desconocía qué podía haber pasado, no era una vecina de la ciudad y los menores no estaban escolarizados allí, sino en un pueblecito de Sevilla.
Conforme pasaban las horas, comenzaban a conocerse más datos. La Guardia Civil hispalense investigaba la desaparición tras una denuncia por parte del progenitor el pasado 16 de diciembre en la localidad de Mairena del Aljarafe.
En realidad, el padre no veía a los menores desde el 4 de noviembre. La madre avisó al juzgado, al colegio y al progenitor de que se iban a Jerez de la Frontera. Abandonaban Sevilla para desplazarse a otra localidad a 80 kilómetros. ¿El motivo? No quería vacunarles.
Según la defensa de Cristina, se fue porque el padre quería vacunarlos de la Covid-19 ese mismo día a la salida del colegio, después de que un juez resolviera a favor del padre que éste sí los podía vacunar cuando estuvieran bajo su custodia.
Contra las vacunas y el protector solar
El letrado del señor Kau afirma que el pleito no sólo tiene que ver con la vacuna contra el coronavirus, sino con otras causas. Así, Javier Toucedo apunta: "El problema inicial era un procedimiento en el que [la madre] se negaba a todo tipo de vacunas". Toucedo añade sobre Cristina que es una mujer "antivacunas, antibronceador en verano, no quiere echarle bronceador a los niños porque es cancerígeno y deja que se quemen… Como eso, tres mil cosas".
Disputas aparte, el padre no sabía dónde están sus dos hijos hasta este miércoles. El 4 de noviembre dejó de verles, pero desde este 5 de enero, dos meses después, David se ha vuelto a reunir con sus hijos, Diego y Hugo, mientras que su madre tiene libertad con cargos y una orden de alejamiento de 300 metros.
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