Así se define Alberto Chicote del Olmo (Madrid, 23 de junio de 1969) en Twitter: "Soy cocinero, de esos que les corre el AOVE (aceite de oliva virgen extra) por las venas, que cocinan más con las tripas que con la cabeza y que se comen la vida a bocados de placer". Aunque en realidad es mucho más que eso, porque también es empresario, presentador y autor de libros. Y, por qué no decirlo, un polemista capaz de viralizar cada una de sus acciones.
Se podría decir que es una mezcla perfecta de sus dos pasiones deportivas: el rugby y el tiro con arco. Como el primero de los deportes mencionados, Chicote parece un hombre tosco, algo bruto de apariencia, pero que luego muestra más humanidad que muchos en múltiples de sus gestos. Como el segundo, es certero en sus empresas.
Utilizamos, de muestra de estas dos bondades, un botón. La forma en la que disfrutaba antaño de su pasión por el tiro con arco, por ejemplo. Lo comentaba en una entrevista con Olga Viza, en Marca, hace casi 10 años, cuando acababa de ser lanzado a la fama. Llevaba a la periodista al lugar al que le gustaba tirar.
"Es un circuito de bosque en 3D, porque no tiras a dianas planas sino a unos bichejos de espuma o de plástico estratégicamente situados en el bosque. Simulas ese acto primitivo de la caza, pero, claro, sin tener que hacer daño a ningún bicho. Cuando oyes hablar del tiro con arco no te imaginas esto. Mi primo Emilio fue quien me lo enseñó y le dije: “¿De dónde ha salido esto?”, contaba el cocinero.
Eso en lo humano, pero Chicote tambié hila muy fino en sus disparos. Le va bien en sus proyectos, ¿alguien tiene dudas? El último, además de la presentación de su reciente libro, es Sesto 27 SL, una empresa recién nacida en el pasado mes de julio y que está dedicada al mundo de la restauración. El proyecto, a medias con su mujer Inmaculada Núñez, aún está en visos de salir a la luz pública
Además de esta empresa, tiene otras dos. Es el administrador único de Archiol Restauración SL, una sociedad constituida desde hace años, con unos activos de 374.417,86 euros en el último ejercicio y que, en 2020, consiguió unos beneficios de 42.299,95 euros, según las últimas cuentas inscritas en el Registro Mercantil. Esta empresa era matriz en la gestión de los restaurantes Yakitoro que Chicote acabó por cerrar a finales de 2020 para centrarse en sus nuevos proyectos.
Pero eso es el chocolate del loro. La empresa con la que Chicote factura más es Desolasol Restauración SL. Consta de unas ventas de 2.131.393 euros en 2019 y unos beneficios de 80.141 euros, según los datos de las cuentas ingresadas en el Registro Mercantil en última instancia. Esta sociedad es la que gestiona el restaurante Puertalsol, que está en la Puerta del Sol de Madrid, como su propio nombre indica. Su activo alcanza los 858.926 euros.
Además, según datos de Informa, Chicote también es administrador único de otra sociedad limitada. En este caso, se trata de Consultora de Servicios de Restaurantes, constituida en el año 2000 y de la que pocos datos más constan, más allá de las cuentas registradas en 2003.
Más allá de las empresas
Tenía 17 años el ahora ínclito cocinero cuando comenzó sus estudios. Lo hacía en la Escuela de Hostelería de Madrid, ciudad de la que es natural. Era (y es) un tipo de barrio. Concretamente, de Carabanchel Alto.
Durante su tiempo como estudiante, Chicote trabajó en varios restaurantes de la capital española. Luego, se marchó a Suiza a vivir y trabajar.
El regreso a España llegó a finales del siglo pasado. Con 29 años, Chicote volvía a casa para probar fortuna. Se convertía en jefe de cocina de Nodo, una idea de fusión japonesa, y de Pandelujo. Ambos eran dos locales con bastante fama en Madrid.
Chicote iba entonces ganando fama en la cocina, pero nunca jamás fuera de ella. Pero, de repente, su carrera se lanzó al estrellato gracias a la televisión.
Al inicio de la década de 2010, le llamaron para hacer Pesadilla en la Cocina -donde tiene una gama de triunfos y fracasos a partes iguales-. El programa tenía una gran audiencia en América, el madrileño lo conocía y lo había, visto, pero nunca pensó en hacerlo. Para él eso era como "montar en un Ferrari", llegó a reconocer.
Pasó de la oscuridad de la cocina a estar en un escaparate ante 3 millones de personas. Casi nada. "30 y pico Camp Nous", llegó a comparar. "Es la hostia, una sensación extraña", decía en 2012 a Olga Viza.
Y de ahí pasó a presentar las campanadas. La primera vez que lo hizo fue en La Sexta, para dar la bienvenida a 2013. Ojo, por entonces, Cristina Pedroche estaba en Zapeando, tras haber pasado por Sé lo que hicisteis el último verano para sustituir a Pilar Rubio, con 25 años. El pequeño Chicote que siempre insistía a su madre para ir a la Puerta del Sol a verlas iba a estar dándolas por la tele.
Y lo que quedaba por venir: se ha convertido casi en un rostro fijo para Atresmedia junto a Cristina Pedroche. Eso sí, no se libra de entrar en la polémica por el vestido de su compañera cada Nochevieja. Como también lo hace por su sueldo. A muchos internautas les fastidia que él ganase alrededor de los 30.000 euros, al lado de los 60.000 euros de ella.
En el plano televisivo, Chicote es todo un éxito. Pesadilla en la Cocina alcanzaría las 7 temporadas. Chicote también estaría al frente de Top Chef durante cuatro temporadas. Ahora, encabeza ¿Te lo vas a comer?, que también alcanza ya el póker con los nuevos capítulos que se están emitiendo ahora. A todo ello hay que sumar los especiales que ha realizado, como El precio de los alimentos, ¿Qué comen nuestros hijo?, Mito de los alimentos o Dietas a examen.
También realizó en 2020 Auténticos, un programa que da a conocer la historia de personas con discapacidad intelectual y que son un ejemplo para todos
Eso en el plano televisivo. Pero Chicote, además de estar en el salón de todas las casas y en las cocinas, también se encuentra en las librerías. En 2013 sacó a la luz el primero: Pesadilla en la cocina: Las recetas del programa por Alberto Chicote y en 2021 publicó Cocina de resistencia: Las mejores recetas para no desperdiciar nada.
Claro está, hubo proyectos que quedaron en el camino. Como ejemplo de ello, la Escuela Chicote (2014-2016), una formación en hostelería bajo el sello de la Universidad UNED (Universidad Nacional de Educación a Distancia).
Cocina de resistencia
Su libro es el último gran reto que tiene ante sí el cocinero madrileño. Tiene un precio de 20,80 euros en tapa blanda y en formato electrónico de 9,49 euros.
El mismo muestra las recetas que Chicote cocinó para sus seguidores de Instagram durante la pandemia con lo que tenía en la nevera. Pero hay mucho más.
"He añadido muchísimas historias, reflexiones, recuerdos de personas que han formado parte de mi vida a la hora de cocinar. No son recetas canonizadas, sino una manera de salir del paso con lo que tienes en la nevera, una forma de poder organizarte para comer rico y agradable con lo que tengas a mano", contaba en exclusiva el cocinero a la sección de Jaleos de EL ESPAÑOL.
Mientras hablaba del libro, también lo hacía de sus negocios. Reconocía que la gestión de los gobiernos durante la crisis de la Covid-19 no le había gustado absolutamente nada. La tildaba, tajantemente, de "patética".
Asimismo, comentaba cómo lo habían hecho en sus empresas para mantener los mismos gastos a pesar de tener una limitación de aforo. "Como a todos los que tenemos un personal a nuestro cargo, mantener una plantilla con una limitación de aforo, horaria, de capacidad de negocio grandísima. Intentar jugar las cartas con los mismos gastos de antes de la pandemia, pero con la gente pudiendo trabajar a un porcentaje menor, es complicadísimo", explicaba.
Chicote tiene muchos proyectos empresariales en el horizonte. Por ejemplo, la empresa de restauración de la que nada se sabe y que compartirá con su mujer. "Paso a paso, poco a poco. Como siempre que hemos puesto Inmaculada y yo algún proyecto adelante. Primero pensar y definir, después llevarlo todo a cero y después… construir un sueño. Un sueño nuestro. Que será para vosotros en… poco", escribía en sus redes sociales el cocinero.
Además de eso, tiene firmada una octava temporada de Pesadilla en la Cocina con La Sexta. Eso sí, dicho programa no puede ser grabado por el momento, ya que los miembros del equipo deben mantener una relación constante durante días con personal del restaurante y de fuera de él. Por lo tanto, dicho show no volverá hasta que no se haya regresado a la normalidad tras la finalización de la crisis sanitaria causada por el coronavirus.
El chico que quiso ser bombero o gemólogo, acabó siendo cocinero. Y a partir de ahí montó todo el imperio que ahora conocen. Un tipo de barrio conocido por todos, amado por unos tantos y odiado por otros tantos, que ahora tiene un imperio. Y lo que queda por venir. A Alberto Chicote aún le quedan dianas a las que disparar y melés por afrontar.