La Dirección General de Tráfico (DGT) refuerza desde este miércoles y hasta el próximo día 22 el control del consumo de alcohol y drogas al volante después de que en las últimas semanas se hayan registrado varios accidentes con fallecidos en los que los conductores responsables han dado positivo a estas sustancias. Dar positivo en alcohol y drogas puede suponer una multa de 1.000 euros para los infractores.
Durante la presentación de la campaña, la subdirectora del Observatorio Nacional de Seguridad Vial, Paula Márquez, ha subrayado que tras el fin de las restricciones, "parece que la gente sale con muchas ganas de recuperar el tiempo perdido y estamos viendo que hay un aumento de consumo" entre los conductores.
Márquez ha recordado que no se puede hacer una comparación con el año anterior, marcado por las limitaciones a la movilidad, si bien respecto a 2019 se está observando en los últimos fines de semana un incremento en la siniestralidad y en la mortalidad, tanto en vías urbanas como interurbanas.
"Nos hemos relajado mucho después de la pandemia. Todos queremos vivir, estamos encantados de que haya más movilidad pero tenemos que hacerlo en condiciones", ha advertido Márquez, quien ha asegurado que ha llegado el momento de "poner el punto sobre la i y darnos cuenta de que la sobriedad es siempre imprescindible".
El pasado fin de semana, veintidós personas murieron en otros tantos accidentes de tráfico, unas cifras que le convierten en el más trágico desde el del 22 al 24 de marzo de 2019, cuando hubo el mismo número de víctimas. Además, fue también el que se cobró más motoristas fallecidos en lo que va de año, en concreto, ocho.
La representante de la DGT ha reconocido que los últimos fines de semana recuerdan a los de "hace bastante tiempo" cuando la siniestralidad se concentraba fundamentalmente entre viernes y domingo. "Con las cifras que van subiendo día a día, igual terminamos el año con cifras que asustan y hay que empezar a poner coto y concienciar a la sociedad", ha incidido.
Durante esta semana, los agentes intensificarán los controles sobre el consumo de alcohol y drogas, que es el factor de riesgo causante de casi un cuarto (24 %) de los accidentes mortales, ha informado la DGT en una nota. Para ello, se establecerán diferentes puntos de control en todo tipo de carreteras y a cualquier hora del día con el objetivo de evitar que personas que hayan ingerido alcohol o hayan consumido drogas circulen por las carreteras.
La DGT intensificará este año el número de controles de alcoholemia y drogas en la carretera.
Para disuadir el consumo de alcohol y drogas durante la conducción en todo tipo de vías, Tráfico ha invitado a los ayuntamientos de más de 25.000 habitantes para que se sumen a la campaña, con el establecimiento de controles en sus respectivos cascos urbanos por parte de las policías locales. Tráfico considera "imprescindible" su participación para realizar la vigilancia lo más próxima a las zonas de consumo y evitar una mayor exposición del riesgo.
La DGT recuerda que en 2019, año de referencia, el porcentaje de conductores fallecidos con resultado positivo a alcohol y/o drogas fue del 39%. De ellos, un 69% presentaron una tasa superior a tres veces la máxima permitida, unos niveles con los que, según Márquez, es "muy posible acabar en el anatómico-forense".
Además, 8 de cada 10 conductores muertos que dieron positivo a alcohol y /o drogas lo hacían con tasas superiores a las establecidas en el Código Penal, porcentaje que en las vías urbanas fue del 83%. Según la Memoria de la Fiscalía de Seguridad Vial, en 2019, 48.078 conductores fueron condenados por conducir con altas tasas de alcohol y /o bajo la influencia del alcohol y otras drogas.
"No dejes que nadie que haya bebido o haya consumido drogas se ponga al volante y, en cualquier caso, nunca subas al coche con una persona en esas condiciones". Es el mensaje que lanzan desde la DGT.
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