A las puertas del 4 de mayo, ya se conoce todo, o casi todo, de los candidatos que se presentan para presidir la Comunidad de Madrid. Pero la política revelación de estos comicios, la médico Mónica García y líder de Más Madrid ha guardado con celo uno de sus mayores secretos: la identidad de su pareja.
De Isabel Díaz-Ayuso se sabe que se separó hace unos meses del peluquero Jairo Alonso. Pablo Iglesias permanece junto a la Ministra de Igualdad Irene Montero. Ángel Gabilondo lleva 25 años con su novia Carmen Gallardo. Edmundo Bal está casado con la abogada Maje Barba. Rocío Monasterio, con Iván Espinosa de los Monteros. Pero, ¿y Mónica García? ¿Con quién comparte su vida? ¿Quién es el padre de los tres hijos de quien esgrime ser madre como una ventaja en campaña? Su nombre no es otro que el alto ejecutivo Enrique Montañés García, según ha podido confirmar EL ESPAÑOL.
Montañés, de 50 años (García tiene 47), es alguien a quien no le gusta aparecer y se ha apartado todo lo posible de la faceta pública y política de su mujer. De él no existe rastro alguno ni en Facebook, ni en Twitter ni mucho menos en Instagram. A pesar de ser el Vicepresidente Senior para el sur de Europa de la multinacional logística Chep, su perfil de LinkedIn tampoco está abierto al público.
Fuentes cercanas a Más Madrid, del entorno de la propia Mónica García a quien conocen desde hace años, aseguran a este periódico que su existencia es un enigma. “Siempre lleva ella a los hijos al colegio. Lo único que sé es que él viaja mucho”, dice una de estas fuentes. El celo por mantener el anonimato de su pareja es incluso anterior a los últimos años, cuando se ha dado más a conocer desde su escaño en la Asamblea de Madrid. “Gente que lleva colaborando desde siempre con ella no sabe nada del marido”, asegura la fuente.
Brillante currículum
Montañés tiene un brillante currículum: dos ingenierías por la Universidad Politécnica de Madrid y la École Centrale de París, un MBA por el Instituto de Empresa (IE) y una holgada trayectoria en el mundo de la logística que le ha llevado a ocupar uno de los cargos de mayor responsabilidad mundial en la multinacional australiana Chep, propiedad del grupo logístico Brambles y fundada por el Gobierno de Australia en 1946.
La empresa se encarga de la fabricación y distribución de pallets y contenedores, dando servicio a miles de compañías. Además, también ofrece soluciones para toda la cadena de suministros de otras empresas. La cadena de suministros es todo el proceso desde que inicia la producción de un bien hasta su comercialización. Montañés ha desarrollado bajo su mandato en Chep diferentes hitos en aplicaciones de software de seguimiento y entrega de pedidos y ha dado un notable impulso al transporte colaborativo de mercancías para corregir la caída del transporte tradicional en Europa.
Solo en su filial española, fundada en 1987, Chep tuvo ventas por 261,4 millones de euros, según datos del último ejercicio publicado, en 2019. Cuenta con 13 sucursales en las principales ciudades del país y tiene 391 empleados. Montañés es el número uno de todos ellos. Por encima de él solo está el barcelonés David Cuenca, presidente de la multinacional para toda Europa.
El marido de García entró en la empresa en 2003 ocupando, desde entonces, diferentes cargos directivos. Fue durante cuatro años Vicepresidente Senior de Supply Chain (cadena de suministro) para Europa y, en julio de 2018, fue nombrado Vicepresidente Senior para el Sur de Europa. “Un puesto en el que ha liderado las operaciones de los centros de servicio europeos de Chep y ha garantizado que desarrollaran su actividad de forma segura y eficiente, además de gestionar la logística de la red europea de la compañía”, describe su perfil en la página corporativa.
Como Vicepresidente de Chep, Montañés está a cargo de la dirección estratégica y comercial para la región sureuropea, que incluye España, Portugal, Francia, Italia y Grecia. De 2011 a 2016, el marido de García también ocupó el cargo de presidente y consejero de la empresa de software especializada en cadena de suministros Blujay Solutions, otra multinacional, con su sede principal en el Reino Unido.
Un piso de 169 metros
La semana pasada se difundió por redes sociales que García vivía junto a sus hijos y su marido Enrique en un ático de 300 metros cuadrados en la calle Alfonso XII, en el barrio de los Jerónimos de Madrid, frente al Parque del Retiro. Pero es falso. Según ha podido saber EL ESPAÑOL, Enrique Montañés y Mónica García viven en un apartamento de 169 metros cuadrados, también junto al parque del centro de la capital, pero en el barrio de Niño Jesús. Se trata de una sexta planta en un edificio de siete.
García, de hecho, nació y creció en ese barrio, como ha mostrado en varias ocasiones, desde los días del temporal Filomena, con una pala en mano achicando nieve, hasta en sus más recientes actos de campaña. En el barrio, muchos la conocen.
El matrimonio se casó con un régimen de separación de bienes. Así, el nombre de Enrique Montañés no figura en ninguna de las propiedades de la política, la cual posee, junto a sus hermanos Sergio y Daniel, una finca en la Colonia de Camorritos de Cercedilla de 2.018 metros cuadrados, de los cuales, 203 están edificados. La líder de Más Madrid también tiene un solar compartido en el mismo lugar de 1.210 metros y otro piso en Madrid, en el barrio de Ibiza, donde se crió, y muy cerca de donde reside en la actualidad junto a su pareja e hijos. Todas las propiedades las heredó a la muerte de su madre, en 2006.
A raíz del falso rumor sobre aquel ático, también se ha especulado sobre que la líder de izquierdas convive con un “millonario”. En su última declaración de bienes, de 2019, García informó de que tenía 111.940 euros en sus cuentas corrientes, dos de ellas compartidas. Mientras que García aseguró tener un salario de 63.246 euros, los sueldos de los directivos de Chep en Europa del rango de su marido son cercanos a los 200.000 euros brutos anuales, según varias páginas sobre empresas consultadas como Glassdoor, Zippia o Wallmine.
Baja de paternidad
Al igual que su mujer en el campo de la sanidad y la política, Montañés esgrime una visión progresista dentro del mundo de la empresa. En una entrevista que concedió a la Fundación SERES (Sociedad y Empresa Responsable), de la que es colaborador, dijo que apostaba por la flexibilización de horarios, en la línea de la ambiciosa propuesta de la jornada laboral semanal de 32 horas que promueve Más Madrid.
En una conferencia interna que dieron las empleadas de Chep para hablar sobre su trayectoria profesional u otros temas de contenido enfocado a la diversidad y la inclusión, Montañés dijo que había cogido “completa” su baja de paternidad. “Yo por ejemplo hablé de mi propia baja de paternidad porque creo que es muy importante ser ejemplo. Yo la cogí completa, desconecté el teléfono y los emails”, apuntó.
Su compromiso con la igualdad de género se manifiesta en otras frases como esta que dijo en la misma entrevista: “Hay que apostar y apoyar la llegada de las mujeres a los puestos de mando en las compañías”.
Así, lejos de parecer un monstruo capitalista, la empresa en la que trabaja Montañés se alinea cada vez más con ideas progresistas como las que defiende García al frente de la candidatura de Más Madrid. Montañés ha sido premiado por la Federación Española de Bancos de Alimentos (FESBAL), ha participado en numerosos congresos como Sustainable Brands, que promueve las empresas sostenibles y se enorgullece de que Chep sea una empresa pionera en el lanzamiento de la iniciativa Zero Waste World. Esta pretende liderar a varias compañías de su estilo para eliminar los residuos y el impacto medioambiental en las cadenas de suministros.
Chep también ha emprendido varias políticas internas para eliminar la brecha salarial o combatir otro tipo de discriminaciones. En 2020, la empresa se adhirió a REDI, “la primera red interempresarial y de expertos en materia de diversidad e inclusión de los empleados y empleadas LGBTIQ+ en España”.
“En Brambles [la matriz de Chep] estamos comprometidos con la diversidad. Vamos a seguir trabajando para garantizar la igualdad y la inclusión de cada una de las personas que forman parte de nuestros equipos”, aseguró Montañés tras la incorporación de su compañía a esta red.
Una en la política, el otro en el primer nivel corporativo, comparten un ideario que esperan que el 4 de mayo se materialice en las urnas con un apoyo masivo. La mujer que dijo “no” a Pablo Iglesias cuenta con su principal aliado, Enrique, en la sombra: un alto ejecutivo de una multinacional que mantiene la discreción como principal característica.