Con la llegada del nuevo año, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha impulsado numerosas novedades. El propósito es mejorar la seguridad en la carretera utilizando, para ello, nuevos controles de velocidad, así como multas como medidas instructivas. También, vigilarán ciertos aspectos básicos de los automóviles ya que estos deberán encontrarse en buenas condiciones.
Ahora, la DGT ha decidido premiar a aquellos conductores que realicen un curso de conducción segura para poder mejorar su seguridad al volante. Y ya hay diferentes autoescuelas que están ofertándolos. Los mismos suponen una gran oportunidad para reciclar a los conductores que no hayan cometido infracciones graves, quieran mejorar su conducción para que se vuelva más segura. Desde la Confederación Nacional de Autoescuelas afirman a EL ESPAÑOL que es un aspecto "futurible" y que se incluirá en la modificación del Reglamento General de Conductores.
Además, estos cursos poco tienen que ver con los impartidos para recuperar puntos que se llevan acabo, actualmente, en distintas autoescuelas. Su objetivo es incidir en el "comportamiento" de los conductores; sirven para recuperar seis puntos que se aumentarán a ocho con la reforma de la ley. Estos sí que son obligatorios en el caso de que se hayan perdido todos los puntos del carné.
Los cambios
Con la reforma de la Ley de Tráfico, Circulación de Vehículos a motor y Seguridad Vial del año 2015 se pretende dotar a los cursos de una entidad legal. Esto se llevará a cabo mediante reglamento y fomentándolo con el premio de dos puntos extra en el carné de aquellos conductores y motoristas.
Esta nueva medida llega junto a muchas otras, como por ejemplo con la iniciativa de acabar con los conductores que alertan de los controles policiales. Lo que para algunos supone un 'alivio' para otros es una forma muy fácil para seguir realizando conductas fuera de la ley. Así, se pone en peligro tanto al resto de usuarios como a ellos mismos.
Conscientes de ello, la DGT ha decidido multar a quien alerte de los controles policiales. Una de las mayores claves de esta iniciativa es la aleatoriedad, por lo que saber el punto exacto donde se encuentran, hará que pierdan su eficacia. Las aplicaciones que más triunfan en nuestras carreteras son Social Drive, Camsam, Radardroid o Coyote. La mayoría de ellas, presumen de señalizar los más de 1.300 radares que discurren por cada kilómetro de nuestras autopistas. Además, también existen grupos de WhatsApp donde los conductores se comunican unos con otros para poder chivarse dónde se encuentran esos controles policiales.