Sentado en su despacho acompañado por el Jefe de la Casa, Jaime Alfonsín. Así siguió el Rey Felipe VI en Zarzuela lo que sucedía este martes en el Congreso de los Diputados durante la última jornada de investidura, en la que finalmente ha sido elegido Pedro Sánchez presidente del Gobierno, gracias a la abstención de ERC y Bildu. El monarca, como es lógico, no ha perdido detalle. Esta vez se juega mucho más y no está precisamente contento con los pactos que van a mantener a Pedro Sánchez a La Moncloa.
Pero ya es un hecho, Pedro Sánchez ha salido investido presidente del Gobierno por dos votos de diferencia: comienza así el primer Gobierno de coalición de la Historia de la democracia española, iniciada en 1977, tras las primeras elecciones democráticas tras la muerte de Franco.
En un momento de la larga mañana el ya jefe de Gobierno comenzó una parte de su intervención con esta cita: "Todos somos hijos del mismo sol y tributarios del mismo arroyo", recalcando que se trataba de una frase de Manuel Azaña, "presidente de la Segunda República". El secretario general del PSOE no es el primero que usa esta cita del político de Alcalá de Henares en el hemiciclo nacional. Hace poco más de dos años, Mariano Rajoy la pronunciaba durante un pleno en el Congreso sobre la crisis en Cataluña dirigiéndose a Carles Puigdemont.
Pero el entonces jefe de Gobierno citó la procedencia de la frase, pero no el cargo que Azaña tenía. No habló de república. Las intervenciones de Pedro Sánchez. como se ha evidenciado en este debate, están llenas de silencios y de palabras. Silencios ante determinadas afirmaciones como de los portavoces de Bildu o de ERC -precisamente contra la monarquía-, o de palabras duras contestando a otros políticos como Casado, Arrimadas y Abascal. Estas palabras en las que Pedro Sánchez quiso poner énfasis fueron "presidente de la república". Hablar de "república" fue contestado por el hemiciclo con pitidos. Lo que no sabían los diputados era de que se trataba de un claro mensaje a Zarzuela, directo hacia el despacho situado en El Pardo. Por el siguiente incidente.
"Es que ayer no debió de estar a gusto cuando el Rey le recordó las leyes, la Constitución y la Unidad de España. Después del acto de la Pascua Militar Sánchez no se quedó al cóctel, no quería escuchar lo que podría decirle algún militar. Pero a Su Majestad le tiene que oír y aunque él haga oídos sordos al discurso, el Jefe se lo recalcó después, en los pocos minutos que el presidente en funciones se quedó en el Palacio Real", revela a EL ESPAÑOL una fuente cercana al Palacio de la Zarzuela. La respuesta sibilina de Pedro Sánchez fue citar al presidente de la República, Manuel Azaña, momentos antes de ser investido.
El pulso que desde Moncloa se echa a Zarzuela desde hace unos meses ha tenido en la escena de este martes su momento álgido. "Lo de esta mañana no es llegar tarde y hacer esperar al Rey, no se trata de no pasar el informe semanal de los actos, ni si quiera es intentar enviar al Rey lejos de Madrid mientras negocias con Podemos... Ha sido una clara alusión a la república. No sabemos exactamente qué ha querido decir" duda la misma fuente de la Casa.
"Sánchez es pasajero, Felipe no"
El caso es que las palabras del presidente del Gobierno han provocado una oleada de alusiones a Felipe VI. El primero ha sido el presidente del Partido Popular, Pablo Casado, quien comenzó su intervención con Vivas al Rey. Desde su bancada, Abascal y el portavoz de Vox, Espinosa de los Monteros, le aplaudieron con entusiasmo. El remate vino de la mano de Pablo Iglesias. "Si quieren ustedes defender a la Monarquía, eviten que la Monarquía se identifique con ustedes. Si algo sabía el Rey Juan Carlos I, que venía de donde venía, es que solo alejándose de la derecha la institución podría pervivir. Quizá se hayan convertido ustedes en la mayor amenaza para la Monarquía", aseguró el líder de la formación morada.
"Estas cosas no le gustan nada al Rey. Que le usen de arma arrojadiza. El Rey es el Rey y punto. Al igual que la Constitución, cuando ellos se vayan él seguirá aquí, velando por los intereses de los españoles y de España. Ellos son pasajeros, Felipe VI no", aseguran a este periódico desde Casa Real.
En pocas horas Pedro Sánchez acudirá al Palacio de la Zarzuela para jurar su cargo ante Felipe VI. La que no estará presente será la Reina Letizia. Desde que el nuevo Monarca llegara al trono se suprimió lo de que la Reina estuviera en los juramentos de los nuevos cargos, cosa que sí hacía doña Sofía.
"El Rey espera a Sánchez con la mejor de las sonrisas, faltaría más. El presidente del Gobierno ya ha escuchado el mensaje alto y claro :Constitución y Constitución, todo está permitido pero cumpliendo la ley. Y ahora a trabajar, que es lo que mejor sabemos hacer todos", concluye la fuente muy próxima a la Jefatura del Estado.